Moneda en el Aire

Igualdad en puestos y responsabilidades

Cuando una empresa sienta la misma empatía porque un padre se quedó cuidando su hijo y no fue la mamá, en ese momento se avanzará en la igualdad.

Para que más mujeres estén en puestos directivos o simplemente logren avanzar en el difícil mundo financiero, se requiere no sólo tener las capacidades para ello, sino también que en este ambiente tradicionalmente dominado por hombres, estos aprendan poco a poco a impulsar a más mujeres a llegar a estos niveles, y comprender que no se trata de desplazar a nadie, sino más bien trabajar en equipo.

Hoy la industria bancaria, al menos en niveles altos, ha ido evolucionando para impulsar a más mujeres en la industria, pero más que buscar que lleguen a puestos altos por el género se debe trabajar en la igualdad en otros temas que inciden que muchas mujeres no quieran aceptar esos cargos, un ejemplo es que los que tienen hijos asuman la crianza compartida y sea el padre quien también se quede en casa a cuidar a su hijo o lo acompañe en alguna actividad, las empresas que logren ese equilibrio de apoyar a los hombres y entender que es también parte de su tarea y no solo de la mujer, tendrán mejores avances.

Si bien, Jennifer Calvery, directora mundial de Crimen Financiero en HSBC es una de las mujeres que más conoce sobre el tema del combate al fraude y lavado de dinero a nivel mundial, también es una convencida en que, en las empresas se debe impulsar y motivar a las mujeres a llegar a niveles más altos en el organigrama, por lo que participa activamente dentro de la institución y en cada país que visita, no solo en la vigilancia de los controles de prevención de fraudes y lavado, sino también en motivar a más mujeres a escalar. Al menos en su área hoy hay un número importante de mujeres a nivel directivo vigilando el origen y destino de millones de cuentas.

En el caso de HSBC, las principales directivas en México como Lyssette Bravo en Comunicación y miembro además del Comité Ejecutivo de América Latina del grupo, por ejemplo da mentorías a otras mujeres para impulsarlas a que mejoren sus posiciones, ya que si bien a nivel medio la cantidad de mujeres es importante, ya en niveles directivos disminuye drásticamente.

El principal obstáculo es el miedo a solicitar esos puestos por descuidar a la familia o la pareja, por la demanda de tiempo que implica, coinciden muchos de los principales directivos bancarios del país, pero también reconocen que es porque hace falta no solo más empatía sino también que los hombres asuman roles de igualdad, por ejemplo en el cuidado de la familia; cuando una empresa sienta la misma empatía porque un padre se quedó cuidando su hijo y no fue la mamá, en ese momento se avanza en la igualdad. A unas horas del Día Internacional de la Mujer, aún falta mucho, pero mucho por avanzar.

Un claro ejemplo en donde hay evidentes rezagos es en los deportes; dos ejemplos: el Abierto Mexicano de Tenis que se realiza en Acapulco es, sin duda, uno de los mejores eventos del país y me atrevo a decir del mundo, todo es casi perfecto, pero casi lo que ganan las mujeres es infinitamente menor a lo que reciben los hombres, podrán decir que los nombres o rankings, pero el premio al ganador que este año fue a uno de los clasificados muy lejos del top ten, es por mucho más grande la bolsa que para ellas, ojalá eso se pueda cambiar. Otro ejemplo es el de la liga femenil mexicana de futbol. Si han tenido oportunidad de ver los partidos, el esfuerzo y entrega en la cancha no le pide a ningún jugador, pero ellas son otro caso de lo poco que ganan, esas brechas salariales esperemos se cierren. Por lo pronto, la moneda está en el aire.

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