Moneda en el Aire

Los cambios que no hubo con AMLO

López Obrador ha dejado en el olvido y no ha vuelto a mencionar la descentralización de las secretarías de Estado.

La cuenta regresiva empezó, y ahora la fiesta en todo su esplendor es la reforma judicial aprobada con bomba, perdón, bombo y platillo, pero que ya prendió las alertas entre todo el sector financiero y empresarial, no sólo de México sino de los grandes capitales del exterior, a los cuales también les han aplicado el “ni los ven ni los oyen”.

Pero dejando eso de lado, al final ya de este sexenio, hay una larga lista que el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador ha reconocido que no ha cumplido; se va con muchos pendientes, proyectos inconclusos, promesas incumplidas y verdades a medias. Sin embargo, abiertamente el mandatario ha reconocido únicamente dos, y eso porque quedaron plasmados dentro de los 100 compromisos que presentó públicamente al inicio de su gestión.

Otros temas los ha dejado en el olvido y no ha vuelto a mencionar, como es el fracaso total en descentralizar de la Ciudad de México la operación de las secretarías de Estado, proponiendo de manera irreal que se fueran a operar a diferentes estados del país, hecho que simplemente no se cumplió ni de cerca.

A lo largo de 2019 López Obrador insistió en que se descentralizaría el gobierno federal y que la secretarías serían ubicadas en diferentes estados de la República. Solamente cinco cumplieron con el mandato presidencial y eso de forma fragmentada y más de palabra que de hechos.

Medio Ambiente se mudó parcialmente a Mérida, Yucatán; Cultura alquila un edificio en Tlaxcala, pero su actividad central siguió en la capital del país; la Secretaría del Bienestar aparentó despachar en Oaxaca, quizá fue la única que se mantuvo en la Ciudad de México, pero en largos periodos en donde hacía falta, como en Guerrero con Otis; mientras que la Secretaría de Energía, que sigue teniendo su sede en el centro de la nación, mantiene oficinas en Tabasco en una clara simulación para cumplir con la instrucción presidencial. De manera similar, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social puso su oficina central con dirección en León, Guanajuato, aunque en los hechos prácticamente toda la burocracia sigue en la Ciudad de México. De hecho, ningún trabajador registró movilidad hacia esas ciudades del interior.

En Guerrero, se quedaron esperando la llegada de la Secretaría de Salud en la Costera Miguel Alemán, dependencia que nunca llegó, e incluso a estas alturas de 11 meses, el Hospital Regional Vicente Guerrero sigue con grandes carencias en su infraestructura causadas por el huracán Otis, sólo hay que darse una vuelta.

De la Secretaría de Turismo, no se diga; quizás ahí habría que contar solo las giras y fiestas del secretario saliente por el interior del país, que cuente esas visitas como oficinas alternas.

Al final nadie se movió porque todo sigue concentrado en la Ciudad de México y es un hecho que operar fuera de donde se mueven los temas políticos, el Congreso, los empresarios y el sector financiero, no es viable para muchas dependencias, aunque en algunas de ellas no sería mala idea que operen en otros lados, ya que al final en este sexenio, a varios secretarios salientes no se les vio nunca.

Se prenden alertas en Morelos

Margarita González Sarabia

Todavía no toma el cargo de gobernadora en Morelos Margarita González Sarabia y ya anda generando preocupación entre el gabinete de seguridad del próximo gobierno federal de Claudia Sheinbaum, y es que se ha mencionado que será integrado como secretario de Seguridad del estado Ángel Urrutia, lo que prendió las alertas del equipo de transición federal.

Esto porque se achaca a Urrutia como el autor de filtrar información contra Omar García Harfuch, actual senador de Morena y próximo secretario de Seguridad en el gabinete, pero también sobre otros muchos personajes a los que Ricardo Mejía, quien fue jefe del susodicho Urritia, buscaron minar con información dolosa, además de que en el círculo del presidente saliente, López Obrador, son vistos con malos ojos porque como sabemos se fue de candidato a otro partido y traicionó a los morenistas. La próxima gobernadora deberá ser muy cauta en los nombramientos para no ponerse el pie antes de ni siquiera empezar su gestión.

Mujeres al frente en DHL

Carla Carrillo

Es un hecho que la presencia de mujeres en posiciones de liderazgo dentro de las empresas contribuye de forma importante en la visión y crecimiento de las mismas, tema en el que DHL Express México trabaja al nombrar a Carla Carrillo como nueva chief financial officer (CFO).

El objetivo de la empresa es tener una mayor presencia femenina en posiciones de liderazgo, y Carrillo Mayagoitia durante 17 años ha trabajado en DHL, donde antes de ser nombrada directora financiera de la división Express en México, fue vicepresidenta de Servicios Comerciales de la Región Américas, liderando el desarrollo de los centros de servicio compartidos en Costa Rica y Buenos Aires.

Además de que tiene más de 30 años de experiencia en finanzas y liderazgo corporativo en PwC, Bristol Myers Squibb, Procter & Gamble y Swissport Cargo.

Buen avance en la compañía que es el principal proveedor mundial de logística por contrato.

¿Regresará la transparencia en Cenace?

Emilia Esther Calleja

La próxima titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Emilia Esther Calleja, tiene ya un temita pendiente, ya que el saliente optó por todos los medios minimizar el tema de los ‘apagones’.

Esto, al extremo de que luego del panorama retador que se vivió durante el verano, el Cenace decidió ocultar públicamente información del sistema eléctrico, pues primero dejó de publicar las alertas del estado operativo del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) desde el pasado 18 de mayo de 2024.

Luego, en julio, a través de su sección de avisos y notas informativas, se dio a conocer que la información del Margen de Reserva Operativa dejaría de ser de dominio público por razones de seguridad nacional, datos que sí se conocían antes. Ojalá esto cambie en el próximo sexenio.

Por lo pronto, la moneda está en el aire.

COLUMNAS ANTERIORES

Otra vez, Acapulco
El siguiente paso, la IP y gobierno

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.