Isabel Cruz

La prioridad de AMLO: pagos directos y eliminar el efectivo en México

El anuncio de la prioridad de pagos directos y eliminar el efectivo, es una excelente noticia si ello significa soluciones estructurales permanentes, dice Cruz.

El Presidente Electo de México Andrés Manuel López Obrador dio a conocer los cinco temas prioritarios a definir antes de iniciar su mandato el día 1º de diciembre del 2018, uno de ellos se refiere a los sistemas de pago refiriéndose a él como: "Un mecanismo para dispersar los recursos económicos para los beneficiados de los programas sociales, donde no hay inclusión financiera o sucursales bancarias". Por lo mismo, explicó que se esta creando un sistema de entrega de fondos de manera directa, para que no haya intermediarios y no se use dinero en efectivo" (Polemon.mx, 09sept2018). Poco después aseguró que el Bansefi cambiará nombre por el de "Banco del Bienestar Social" y se ocupará de llegar hasta las comunidades más alejadas.

Con cifras a diciembre del 2017, los programas sociales atienden 15.1 millones de personas con apoyos mensuales y bimensuales, para un total de 90.9 millones de transferencias que deben dispersarse en al menos 200 mil localidades. Los nuevos apoyos al programa de "Jóvenes construyendo el fututo" "apoyo universal a adultos mayores y discapacitados" y otros como "un millón de hectáreas", aumentará al menos un 20% la base de beneficiarios para casi 110 millones de pagos. En la actualidad Bansefi paga los apoyos de PROSPERA y una quinta parte de los de Adultos mayores. Para ello tiene 15 mil puntos de pago, de los cuales 5 mil son fijos y semi-fijos y 10,000 son puntos de pago móviles (en efectivo). Falta incorporar la acción de bancos comerciales y otras instituciones que también pagan. El gasto social tan sólo para llevar dinero a zonas alejadas y atomizadas es enorme, algunas veces es mayor el costo de pagar que el apoyo que se da. Por eso es importante la decisión de dejar de pagar en efectivo e introducir pagos electrónicos, con uso de celular y/o de tarjetas. El costo de los pagos en efectivo son altísimos para la economía, es por tanto acertado invertir en soluciones estructurales.

Priorizar pagos directos y eliminar el efectivo tiene al menos tres implicaciones estructurales, una de ellas cambios en el sistema de pagos. Nos remite (conceptualmente) a un estado de derechos donde los ciudadanos mexicanos han alcanzado inclusión financiera e inclusión digital. De alguna forma es haber logrado el Derecho fundamental consagrado en el Artículo 6º Constitucional, de acceso a las tecnologías de la información y comunicación, incluyendo banda ancha e internet. Lo que de ser cierto es una buena noticia. La inclusión digital no sólo permite eliminar el efectivo, tambien tiene implicaciones en la educación y el derecho a la información.

Lograr este derecho requiere la intervención del Estado con la activa participación de los particulares. El Estado para garantizar "piso parejo" de acceso a todos, incluyendo a los pobres; porque dejar esas tareas a los interereses de particulares haran que esos medios lleguen sólo a zonas donde sea rentable.

Un primer cambio estructural está en el tema de telecomunicaciones, es importante subrayar que a pesar de las grandes inversiones públicas, la Red Compartida generada por la Reforma de Telecomunicaciones llegará en 2024 a 103 millones de mexicanos, el 92% de la población del 2010. Pero en el 2024 la población será mayor y al menos 30 millones de mexicanos quedarán excluidos. Y esos son los pobres rurales.

Un segundo cambio esta en la inclusión financiera, en la actualidad sólo 33% de la población adulta del país tiene acceso a una cuenta de ahorro. La mayoria de las 200 mil localidades donde llegan los subsidios no tienen inclusión financiera, definida como el acceso permanente y accesible a servicios de ahorro, crédito, seguros, pensiones, medios de pago, lo que significa presencia permanente de instituciones y una oferta adaptada a esas regiones, territorios y a la población pobre.

Un tercer impacto son los medios de pago. El monopolio bancario en medios de pago trae consigo un elevado costo por comisiones de cuentas bancarias, por el uso de tarjetas o de transferencias, lo que requiere la democratización de los medios de pago con más jugadores y reglas de funcionamiento menos protectoras de los intereses bancarios y más accesibles a la masificación de transferencias de dinero sin costo para los usuarios.

Eliminar el uso de efectivo es viable si existe un eficiente, moderno y accesible sistema de medios de pago, que permita la interacción de todo tipo de medios de pago, con transferencias vía celular, uso de tarjetas, transferencias electrónicas, con interoperatividad de todo tipo de instituciones financieras (bancos, cajas populares, corresponsales, integradores de pagos, remesadoras). Comunicar a las instituciones entre si, pero también a las personas (P2P). El punto básico del sistema es que todas las personas y todos los negocios tengan acceso de una cuenta de ahorros.

Así que el anuncio de la Prioridad de pagos directos y eliminar el efectivo, es una excelente noticia si ello significa soluciones estructurales permanentes. Para lograr este objetivo Bansefi no será suficiente, deberá ser parte de un Ecosistema más amplio e incluyente, donde la banca social y popular como las Sociedades financieras comunitarias, sociedades cooperativas de ahorro y préstamo y sociedades financieras populares penetren ampliamente en la base de la pirámide (que de 3,200 sucursales debería llegar al menos a 15,000 sucursales); también requiere la participación de banca comercial (10,500 sucursales y 45,000 Cajeros), de corresponsales bancarios (48,000) y de nuevos tipos de corresponsales y de millones de celulares personales.

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