Para complementar la formación y educación de cualquier sociedad, los museos son necesarios, sin embargo, con la pandemia no sólo han tenido que renovarse, sino concientizar sobre su relevancia.
¿A qué me refiero?
Al tratar el tema de los museos, existen diversas figuras que influyen en sus finanzas, tanto del ámbito público como privado (sin fines de lucro, con fideicomisos, apoyos, etc.) que al final, han contribuido su supervivencia ante la pandemia.
El Museo Interactivo de Economía (MIDE) al ser un fideicomiso privado, gran parte de sus recursos los recibe a través de los ingresos, sin embargo, al abrir en septiembre como se tiene estimado, con las medidas establecidas, tendrían pérdidas automáticas del 70 por ciento.
Asimismo, a diversos directores de museos preocupa la falta de entendimiento del Gobierno hacia los recintos culturales.
La directora del MIDE, Silvia Singer, ha señalado que de no abrir los espacios públicos en septiembre, y la crisis sigue manejándose como hasta ahora, se corre el riesgo de desaparecer. Además de que este gobierno no apoya este tipo de iniciativas.
Aunado a esto, también ha mencionado que no dependen de ingresos por ser privados, pero les beneficiaría que existieran un impulso fiscal para sobrellevar mejor la situación.
Por su parte, la directora del museo Museo Diego Rivera-Anahuacalli y Frida Khalo, Hilda Trujillo señaló que los museos no tienen una figura legal reconocida ante autoridades hacendarias y que los ponen en el mismo rubro de centros nocturnos, que sí bien hay vocación mercantil, se deben separar instituciones y fines de lucro.
Con dichas declaraciones, es preocupante que hasta hoy, si bien han existido los acercamientos con autoridades, se carezca de una resolución e impulsos fiscales para facilitar el manejo de la crisis.
Otro factor a destacar de los museos es la digitalización de sus servicios, en este caso: exposiciones, talleres, entre otros; que han ayudado a captar ingresos mínimos, un respiro que serviría para complementarse en un futuro con la parte presencial.
Ejemplo de ello es el Museo Franz Mayer, que con su directora Alejandra de la Paz busca aprovechar algunos talleres de fotoperiodismo y exposiciones icónicas cómo el World Press Photo, entre otras que pueden disfrutarse.
O bien el Museo Frida Khalo y Anahuacalli que también han llevado sus exposiciones a la parte digital, aunque el proceso les tomó dos meses en curar el material y subirlo.
Si bien, todos los museos son valiosos en la parte educativa y cultural, debo señalar dos que, por su giro, resultan ser relevantes para entender la época actual.
El museo Memoria y Tolerancia a través de su vicepresidenta, Mily Cohen, hoy destacan por diversas formas de afrontar la pandemia no solo dando cursos digitales, sino también exposiciones itinerantes como el Túnel Memoria y Tolerancia y Túnel de Cambio Climático.
Además, de seguro con su línea de promotores de la Paz promoviendo acciones para la reconstrucción del tejido social, participando en programas sociales para grupos vulnerados, mismas que lograron gracias a las donaciones y taquilla.
Por otra parte, la directora del Mide Silvia Singer ha lanzado una oferta atractiva que venían haciendo con más de 100 proyectos enfocados en comprender la economía, finanzas y la sostenibilidad que serán claves para entender la situación actual.
Todos los museos anteriormente mencionados se han unido a la iniciativa "Museo Seguro", que busca garantizar a todos una visita guiada con el aforo especificado por la ley en la reapertura gradual.
Al analizar los esfuerzos que todos los recintos culturales se encuentran ejecutando explotando sus particularidades, es necesario un apoyo no sólo del gobierno, sino de la sociedad para preservar la cultura, patrimonio histórico y fomento de la educación.
Lo que refuerza la frase del escritor Orhan Pamuk: "los museos son lugares donde el tiempo se transforma en espacio".