Entre Reflectores

Fiestas patrias, un espectáculo para rememorar

El ambiente festivo por las fiestas patrias no se perdieron este año pese a la pandemia del nuevo coronavirus.

El tema de la semana en todos los ámbitos fue la conmemoración del 210 Aniversario de la Independencia por la trascendencia y forma inédita que se llevaron a acabo los festejos.

De entrada, para hablar de esta celebración que se conformó el 15 y 16 de septiembre tenemos que mencionar la relevancia que adquirió la sociedad y plataformas virtuales, pues el festejo mismo provino de los ciudadanos más que de el Gobierno federal.

En medio de una crisis sanitaria, los ánimos mediáticos que pudieron verse en redes sociales fueron variables y con justa razón ambas opiniones tanto positivas como negativas tenían puntos defendibles.

Hoy el país con más de 72 mil muertes por Covid-19 según cifras oficiales del Gobierno federal es más que comprensible que no haya ánimos de aplaudir, inclusive si son eventos cerrados como el Grito que costó 12 millones 710 mil 440 pesos más que la faena del año que rondo entre los 9.5 millones de pesos según consultas realizadas a la plataforma Compranet.

Pero dentro del aspecto positivo, lo destacable es que la ciudadanía mostrará el lado amable que caracteriza a los mexicanos a través de redes sociales mostrando desde platillos, reuniones familiares o momentos disfrutando de conciertos virtuales.

Aquí se debe destacar la inmensa labor de artistas y personal que hace posible que se lleven a cabo este tipo de eventos, entre algunos de los que destacaron fueron el de Lila Downs desde el teatro Macedonio Alcalá en Oaxaca, el concierto que fue transmitido en embajadas o consulados de Rosy Arango y la cartelera que ofreció el programa contigo en la distancia con Tierra Mestiza, Sonido Gallo Negro, Las Hermanas García y los Sinaloenses.

No obstante, el evento que culminó los festejos sería la condecoración de los 58 integrantes del sector salud que han luchado incesantemente por salvar vidas con la condecoración Miguel Hidalgo en el grado Collar acompañados posteriormente de una reducida comitiva de elementos militares.

Mismo evento se debe analizar en dos partes, la primera es que si bien fue importante celebrar la independencia, este año sobresale por el surgimiento de nuevos héroes que desde sus trincheras fueron reconocidos por los mismos integrantes de la sociedad que se han recuperado de Covid-19 y colegas de su ámbito.

El hecho trascendental de este suceso televisado que a pesar de dar la sensación de sobriedad, reflejó de forma perfecta dos cosas, una el sentimiento de una sociedad contemporánea que se pandea por la vulnerable situación debido al virus y otra la valía y la esperanza de salir adelante siendo solidarios.

Por otra parte, en la cuestión militar a pesar de ser menos elementos compuestos por motorizados, agrupación montada y fuerza aérea este año uno de los detalles que más llamo la atención fue la falta de cánticos y el ambiente festivo que termina por hacerlo un evento único para las familias, que al ser televisado, quizá fue lo más correcto.

En conclusión, los festejos patrios del 210 aniversario de la Independencia terminarán por marcar un parteaguas en la historia del país, no solo por la histórica plancha del Zócalo vacía, también por el significado que conlleva ante una sociedad mexicana que ha sufrido desde el inicio de la pandemia.

Hoy quizá una de las frases que terminaría por aportar una mayor reflexión sería la de Manuel José Othón "la nación más grande y más potente, es débil si le falta justicia".

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