En el espejo de Washington

Latinos en la Casa Blanca

Los latinos son parte de la historia americana; el innegable peso demográfico de los latinos en EU, especialmente entre los menores de 18 años, donde uno de cada cuatro son hispanos.

CEO Founder LEXIA Insights & Solutions

Así el viernes pasado en la Casa Blanca.

La primera dama Jill Biden, siempre sonriente y cordial nos da sus palabras de bienvenida y a la vez traza el perfil de los invitados a la Casa Blanca para celebrar el Mes de la Herencia Hispana: “Esa historia está aquí hoy. Políticos y poetas, profesionistas, artistas y organizadores que dan forma a nuestra nación todos los días. Joe y yo estamos orgullosos de estar a su lado para celebrar sus victorias”.

Toca el turno del presidente que subraya como él y su partido son quienes apoyan a la comunidad latina de los Estados Unidos, en contraste con sus rivales republicanos, que se las han puesto fácil por estar tan abiertamente en contra de la migración y el multiculturalismo.

El mensaje es cálido y predecible. Los latinos son parte de la historia americana; el innegable peso demográfico de los latinos en Estados Unidos, especialmente entre los menores de 18 años, donde uno de cada cuatro (25 por ciento del total) son hispanos; la anécdota de cuando su amigo el embajador Ken Salazar le dijo “mi familia lleva en estas tierras más de 400 años”; Los impactos positivos en materia de empleo, salud y educación impulsados por su administración; el compromiso por buscar un camino a la ciudadanía para los dreamers, las personas que entraron a los Estados Unidos traídos por sus padres cuando eran menores de edad y que hoy pueden vivir de manera legal en el país, pero durante un lapso perentorio, lo que los tiene a ellos y a sus familias en la ansiedad permanente.

Falta muchísimo por hacer en materia de inclusión, respeto, representación y oportunidades para la población latina, pero un paso adelante es que el discurso demócrata es positivo e incluyente.

Hay déficit de hechos, pero mucho empieza por el lenguaje y las narrativas. Ya se llegará a los hechos y a las realidades y esto dependerá en gran medida de algunas de las personas que acudieron a la recepción. No serán concesiones graciosas sino los frutos de una lucha.

El mensaje de Biden va en ese sentido: “Somos la única nación construida sobre una idea. Todas las demás naciones se construyen en función de la geografía, la etnia, la religión o lo que sea. Somos los únicos basados en una idea (…) Sostenemos que estas verdades son evidentes por sí mismas de que todos los hombres y mujeres son creados iguales, dotados por su creador de ciertos derechos inalienables: vida, libertad. Lo decimos todo el tiempo, pero eso es lo que somos (…) Somos una nación de inmigrantes”.

Una vez que el presidente terminó de hablar llegó la hora de saludar y tener breves conversaciones con interesantes personalidades. Con margaritas en mano –aún el mezcal no es mainstream por acá– se dan esos pequeños momentos de convivencia que permiten interactuar al ritmo de un “speed dating” con personajes que con su trabajo, dedicación, visión y compromiso buscan un mundo mejor, especialmente para los latinos que viven en los Estados Unidos.

El grupo es plural y diverso, un verdadero mosaico de voluntades y talentos.

Destaca la presencia y cordialidad del grupo de jóvenes profesionistas hispanos, veteranos de las campañas de Obama y Biden que hoy ocupan importantes posiciones de poder y son quienes aseguran que todo marche sobre ruedas durante la recepción.

Entre las personalidades con quien pude conversar se encuentra Estuardo V. Rodríguez, quien lidera el proceso para establecer el American Latino Museum en el corazón de Washington. Proyecto para que el presidente Biden dedicó estas palabras: “El Congreso debería tomar medidas para honrar a la comunidad latina y a las mujeres con sus propios museos en el National Mall, ya es hora, como un reflejo del importante papel que cada uno desempeña en el tejido de nuestra nación”. Definitivamente no estar en el corazón de los recintos monumentales sería una verdadera afrenta para este proyecto.

Recorrí los salones de la Casa Blanca conversando con Melissa Hurtado, senadora estatal por California, la mujer más joven elegida en la historia de esa cámara. Su distrito se ubica en el gran Valle Central, que alberga algunas de las tierras de cultivo más ricas y fértiles del mundo, lugar de residencia de incansables familias de clase trabajadora. Melissa es un ejemplo de los nuevos liderazgos de mujeres latinas, su labor se enfoca en mejorar la calidad de vida de los residentes y garantizar que las voces rurales se escuchen en todos los niveles de gobierno.

Dentro de un ambiente cordial y animado, dos jóvenes artistas cubanos contagiaban alegría y vitalidad, Yotuel Romero y Beatriz Luengo, dos de los compositores del tema “Patria y Vida” ganador de los Grammys Latinos a la Canción del Año 2021 que nos invitaban a todos a no perdernos el documental que han realizado sobre el impacto generado entre los cubanos por esa especie de himno posrevolucionario durante las protestas populares del 11J.

Personajes como ellos e historias como las suyas se reunieron en la Casa Blanca para celebrar y afirmar que el futuro de los Estados Unidos será mejor y más brillante si logra incluir en serio las voces, luchas, deseos y aspiraciones de la pujante comunidad latina.

Guido Lara

Guido Lara

CEO Founder LEXIA Insights & Solutions.

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