Perspectiva Bursamétrica

¿Qué deberíamos esperar del Paquete Económico 2020?

Para el próximo fin de semana el gobierno debe entregar el Paquete Económico para 2020, en un escenario de recesión global y débil desempeño en la economía local.

Después del Primer Informe de Gobierno, en donde no hubo mucho de que presumir, fuera del cumplimiento de las promesas de campaña, como la puesta en venta del avión presidencial, la transformación de la residencia oficial de Los Pinos en museo, la cancelación de las pensiones a los expresidentes, y la implementación de una serie de programas sociales, del modelo de la economía clientelar, como el de las pensiones a los ninis, con muy opaca transparencia, para el próximo fin de semana la SHCP deberá presentar al Congreso el Paquete Económico 2020. Un paquete que enfrentará el enorme reto de sortear un escenario de posible recesión global.

Los resultados económicos son francamente decepcionantes; la economía esta totalmente estancada, con una crisis aguda de confianza que se refleja en una importante contracción de la inversión, que es el principal motor de la economía, con la consecuente caída de empleos formales. El recorte al gasto público ha sido brutal, para poder otorgar los programas de dádivas a distintos sectores de la sociedad. Una combinación de choques externos salidos del Twitter del presidente Trump, con una serie de decisiones de políticas públicas muy desafortunadas, explican estos resultados. Nuestro indicador IBAM esta pronosticando una caída en el IGAE de julio del 2.8 por ciento anual. A pesar de todo esto, en las encuestas se ve que el capital político de AMLO sigue siendo sumamente robusto, con un natural desgaste.

En los Criterios Generales de Política Económica, que son los supuestos en los que se basa la elaboración de la estimación de los ingresos y el Presupuesto de Egresos, podemos esperar que los mismos sean razonables y creíbles, considerando por lo menos un entorno de desaceleración global; aunque ya existen señales de posible recesión mundial. El evento de un Brexit desordenado tendrá repercusiones en toda Europa. Seguramente también se considerará una posible serie de reducciones en las tasas de interés internacionales, no exento de un incremento en los spreads sobre los mercados emergentes, y la continuación de medidas proteccionistas en el entorno electoral en Estados Unidos. Debe preverse una tendencia a la baja en los precios internacionales de las materias primas. Un ingrediente adicional de incertidumbre lo constituye la ratificación del T-MEC. En un entorno así, los supuestos para México podrían determinarse de la siguiente forma:

1. Crecimiento del PIB de México: Vemos probable que se plantee un crecimiento esperado entre 1.0 y 1.5 por ciento anual. Bursamétrica prevé un crecimiento negativo, basado en un pronóstico de inicio de recesión en EU para el segundo semestre del año entrante.

2. En inflación, vemos probable que se estime en un rango de 3 por ciento a 3.5 por ciento anual.

3. En el precio promedio de exportación de la mezcla mexicana de petróleo podría determinarse en 53/55 dólares. No tenemos conocimiento de posibles operaciones de cobertura realizadas por México, que normalmente se filtran en los medios. En un escenario de recesión mundial, los precios podrían caer por debajo de los 40 dólares por barril. Bursamétrica ha recomendado establecer un programa integral de riesgos, que implica coberturas en los precios de importación de gasolina y del gas natural, así como coberturas ante variaciones en las tasas de interés para la deuda a tasa revisable y en el tipo de cambio.

4. En el tipo de cambio, nos parecería razonable fijar una paridad promedio del peso-dólar cercano a 20 pesos por dólar.

5. En las tasas de interés prevemos que se estime un nivel promedio en la tasa de referencia del Banco de México de 7.50 por ciento anual, 50 puntos base abajo del nivel actual.

6. En la plataforma de producción de Pemex nos imaginamos un nivel de producción estimado de 1.7 millones de barriles diarios.

7. El resultado fiscal, en su definición de resultado primario, que es el supuesto más importante de todos, pensamos que la SHCP va a plantear como ya lo han manifestado el secretario Herrera y el subsecretario Yorio, un resultado superavitario del orden de 0.8 a 1.0 por ciento del PIB.

8. Recaudación y Presupuesto: debe plantearse un modesto incremento en los ingresos, basado principalmente en una más intensiva fiscalización, y una disminución de entre 250 a 350 mil millones de pesos del lado del Presupuesto.

9. Empleo: sería razonable plantear un incremento en la nómina total de cerca de 600 mil puestos a lo largo de todo el año.

10. Inversión pública: prevemos un incremento modesto en el presupuesto de inversiones de capital, para las obras en la construcción de los proyectos icónicos de esta administración.

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