Universo Pyme

La madurez del ecosistema emprendedor en México

Eduardo Torreblanca indica que tras la muerte del INADEM, el padre de toda política emprendedora en el país, las partes a las que protegió se mantendrán en la medida en que hayan aprendido a no depender del centro financiero de la política emprendedora.

A mitad de la semana que concluye una amiga llamó a mi número celular procurando que le ayudara a conseguir 3.5 millones de pesos para echar a andar un proyecto que procura desarrollar el liderazgo en el empresario.

Nadie tiene en el bolsillo esa cantidad de dinero para ver si en el camino se encuentra un proyecto de formación empresarial del que se le ofrece una participación accionaria. Se acabó el INADEM, que tampoco estaba en posibilidades de invertir en un proyecto, llevando como carga el 100 por ciento de las necesidades de capital.

Pero la necesidad parecía clara. Necesitaban esa cantidad de millones de pesos. No explicaban si estaban en disposición de conceder parte del complejo accionario. No manifestaron contar con un Plan de Negocio o ritmos posibles de recuperación de lo invertido.

Al parecer querían el dinero para trabajar el proyecto en la confianza de que al llegar el éxito lo habrían de regresar sin que mediara interés alguno, al parecer. La manera en que plantearon la idea reflejó su novatez en la materia de emprendimiento. Ternuritas diría el Presidente de México.

¿Es México una capital del emprendimiento en América Latina como deseaba SALOMÓN CHERTORIVSKI cuando desempeñaba el cargo de SEDECO, Secretario de Desarrollo Económico de la CDMC? No aún, ciertamente como también habríamos de reconocer que no estamos ya en pañales absolutos.

México suspende su vocación de impulsar el emprendimiento. Una extendida comunidad que fue creada a lo largo de 18 años se quedó sin "Papá" o sin "Mamá". Las SEDECO se quedaron sin un apoyo fundamental en la promoción de emprendimiento y destinan solas algo de dinero en el apoyo de proyectos tradicionales o innovadores.

Con el tiempo, las instancias de apoyo al emprendimiento tendrán que generar modelos de sostenibilidad si quieren mantenerse. Las microfinancieras están más cerca de la sobrevivencia que las incubadoras de emprendimiento.

Muerto el padre de toda política emprendedora en el país las partes a las que protegió se mantendrán en la medida en que hayan aprendido a no depender del centro financiero de la política emprendedora.

Los que hayan ejercido funciones pensando que siempre existiría el INADEM comenzarán, uno a uno, a morir. De hecho ya ha iniciado el proceso. Se mantendrán más sanos de pie quienes hayan aprendido que nunca se juega la vida a una carta. Le hemos dado prueba de ello al hablar de las viudas y de los huérfanos del INADEM. Los más innovadores habrán de marcar nuevos paradigmas como lo habremos de explicar el próximo lunes.

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