Quieren puertos, pero no pueden con Pemex

Colocado en el centro de las críticas por haber decidido militarizar aduanas y puertos, el presidente Andrés Manuel López Obrador debería voltear a ver lo que sucede en las instalaciones de Pemex.

Aquí le platicamos hace unos días el desorden que generó a la terminal portuaria de Dos Bocas la llegada de Pedro Almazán, subdirector de Salvaguardia Estratégica. El general está abriendo frentes de conflicto.

Y es que está contraviniendo los acuerdos que la petrolera dirigida por Octavio Romero tiene con la Defensa Nacional que comanda Luis Cresencio Sandoval y la Marina que capitanea José Rafael Ojeda.

Desde hace dos sexenios, la seguridad de instalaciones estratégicas de Pemex depende de convenios de colaboración con las instancias castrenses, bajo el contexto de preceptos de seguridad nacional.

Las secretarías de Defensa y de Marina proporcionan de manera permanente protección y seguridad a las instalaciones estratégicas de Pemex, así como patrullaje a su red de ductos.

A la Marina le toca la seguridad en costas y zonas marítimas, rubro en el que el almirante Ojeda ha fallado, porque el pirateo a embarcaciones en el Golfo de México se disparó en los 19 meses de gobierno.

Actualmente más de mil 500 elementos de la Defensa están destinados a la vigilancia de instalaciones de Pemex con un costo de unos 850 millones de pesos anuales para la empresa productiva del Estado.

Por lo que hace al caso de la Marina Armada se México, se tiene documentado que solamente entre 2017 y 2019 por concepto de vigilancia Pemex pagó 312 millones de pesos.

Cada elemento de la Marina implica un costo diario de 818 pesos, además de los costos de traslado de personal en buques, que generan erogaciones de hasta 200 mil pesos por día de operación.

Estos convenios de colaboración y las plataformas de seguridad en las que Salvaguardia de Pemex invirtió millones de dólares, dieron resultados. Al cierre de 2019 el robo de combustible cayó 91 por ciento.

El problema es que, con el nombramiento del nuevo subdirector de Salvaguardia, se han acentuado las diferencias y se ha deteriorado la comunicación entre la Marina, Defensa y Pemex.

Rompió los acuerdos entre la Sedena y la Semar para el nombramiento de los responsables de la seguridad en Pemex. Y es que Almazán recién terminó despidiendo a dos contraalmirantes.

Cesó de la Gerencia de Gestión Técnica de Salvaguardia Estratégica, primero, a José Ignacio Moreno, y tres meses después, con lujo de violencia, ordenó la salida de Fernando Verduzco Cota.

Las decisiones erráticas de Almazán, como la de nombrar a su incondicional, José Toledo en lugar de los despedidos, están trastocando las operaciones del centro de mando de la Secretaría de la Marina.

Hay problemas en las cámaras de largo alcance en alta mar y los radares que vigilan la Sonda de Campeche; incluso suspendió el suministro de combustible para embarcaciones marinas y aeronaves.

Las diferencias son tan notorias que se impiden recíprocamente el acceso a las instalaciones que controlan unos y otros. Los reportes del caos llegó ya a los niveles más altos de ambas dependencias castrenses.

ES CLARO QUE tras la llegada de Emilio Lozoya Austin a Pemex, el economista del ITAM y maestro en Administración Pública y Desarrollo Internacional por Harvard empezó a construir una camada de contratistas que desplazara a la histórica y tradicional red de proveedores, mayoritariamente nacionales. De entrada les impuso un muro de contención en el que era imposible acceder a él. Froylán Gracia, su secretario particular, operaba como auténtico cadenero cobrando citas en 50 mil dólares. Se conoce de casos en los que llegaron a sacarle a empresarios hasta 2 millones de dólares con promesas incumplidas. Lozoya quiso apropiarse de negocios en marcha. Además de Oro Negro, a la que arrastró a la quiebra en beneficio de SeaMex, de David Martínez y John Fredriksen, apunte también a Oceanografía y Evya, las dos navieras más rentables del sector que daban servicio a Pemex. Tanto Amado Yáñez como los hermanos Roberto y Javier Camargo, dueños respectivamente de ambas empresas, padecieron el acoso de Lozoya, quien los forzó a vender a nuevos grupos que se alistaban a entrar a la industria bajo la prometedora reforma energética de Enrique Peña Nieto.

TECNOCEN.COM LIBERÓ ayer el portal visitmexico.com de la Secretaría de Turismo. El dueño de la compañía, Sergio Loredo, lo hizo como un acto de buena voluntad y a sabiendas de que con su bloqueo se dañó todavía más la imagen del país como destino turístico final. Loredo sostiene que Braintivity, de Marcos Achar, le adeuda diversos pagos, lo que motivó a inhabilitar el principal motor de búsquedas y de promoción de atractivos turísticos. Sin embargo, su contratante afirma que el 15 de julio pasado se terminaron de hacer los últimos pagos pendientes. Tecnocen efectivamente quiso sacar provecho del control del sitio con un contrato por seis años que Achar no estuvo dispuesto a aceptar. Lo grave es que utilizó como instrumento la propia plataforma digital que pertenece a la dependencia que encabeza Miguel Torruco, de ahí la denuncia que ya trae a cuestas en la Fiscalía General de la República.

TRAS HABER RETIRADO la protección de la bancarrota bajo el Capítulo 11 en Nueva York, el Grupo Famsa empezó a negociar en lo individual con cada uno de sus acreedores aquí en México. No se descarta que las huestes de Humberto Garza soliciten un concurso mercantil preacordado, de ahí la importancia de las pláticas uno a uno. Le decía que el Bancomext que dirige Carlos Noriega es el principal acreedor, con 3 mil 398 millones de pesos, seguido de Multiva de Olegario Vázquez Aldir con casi 896 millones, Monex-Trustee de Héctor Lagos Dondé con 360.4 millones, Whirpool que dirige Juan Carlos Puente con 239.6 millones, Telcel de Carlos Slim con 198.6 millones, Mabe de Luis Berrondo con 187 millones, BanBajío de Salvador Oñate con 171 millones e Intercam de Eduardo García Lecuona con 150.3 millones de pesos, entre otros.

MAC HOSPITALES, QUE preside Miguel Kohury, arrancó esta semana un roadshow digital con miras a colocar mil millones de pesos en Certificados Bursátiles, de un programa autorizado hasta por mil 500 millones a nombre de Mach Health, Sociedad Anónima Promotora de Inversión. Se va a tratar de la primera emisión de deuda de una compañía encajada en el sector hospitalario. La compañía seleccionó a la nueva Bolsa Institucional de Valores como plataforma para salir al mercado. El agente financiero es Actinver, de Héctor Madero, y el representante común CI Banco, que dirige Salvador Arroyo. Mac Hospitales posee a la fecha siete nosocomios ubicados en Celaya, Irapuato, Guadalajara, Puebla, San Miguel Allende, Aguascalientes y Mexicali. Los recursos servirán para crecer a 10 hospitales el próximo año.

QUIEN SE ENCUENTRA celebrando es Tu Casa Express, que fundó hace 25 años Modesto Gutiérrez. En el contexto del festejo, y aún cuando pareciera que no es el mejor momento para comprar hipotecas, nos cuentan que buscará la reactivación de este sector mediante el impulso en 2020 de créditos por 800 millones de pesos. De acuerdo con la empresa, 650 mil familias necesitan un hogar, pero sólo 4.9 por ciento logra comprar una vivienda, por lo que a diferencia de la banca tradicional, tratan de ser más flexibles, incluidas personas en el Buró de Crédito que en algunos casos son rechazados. Al hacer un balance de estos 25 años han otorgado créditos hipotecarios por 6 mil millones de pesos.