Desde ayer, día 1 de la alianza Va por México, que anunciaron PRI, PAN y PRD, luego de que sesionó por la tarde la Comisión Política Permanente del tricolor, se comenzó a lanzar la campaña de redes, ya con logo y mensajes con letras multicolor: azul, morado, guinda, rojo, naranja y amarillo. "Va por mejorar el sistema de salud… Va por México", o "Va por tratamientos para los niños con cáncer…" son algunos de los eslóganes que legisladores y líderes partidistas comenzaron a difundir profusamente. A ver cómo les funcionan.
Marcelo y los policías
Parece que ayer el multifacético canciller Marcelo Ebrard, quien desde la Secretaría de Relaciones Exteriores ha asumido ya distintos roles en la 4T, se puso nostálgico y recordó cuando fue secretario de Seguridad Pública del entonces Distrito Federal, en el mandato de AMLO. El funcionario posteó una felicitación a los policías en su día. Sin embargo, más que buenos deseos, sería útil para los uniformados que se atiendan sus precarias condiciones. Según la más reciente encuesta de la organización Causa en Común, bajos salarios, jornadas laborales extenuantes y necesidad de comprar con su dinero insumos de trabajo son algunas situaciones que demuestran el abandono de las policías del país por parte de los gobiernos estatales y el federal.
La mañanera, el Estado y la libertad de expresión
Vaya polémica la que cundió ayer en redes sociales y medios de comunicación por el episodio de la mañanera en el que el presidente López Obrador presentó en la tribuna de Palacio Nacional una publicación del monero Hernández, de junio pasado, que tilda de "chayotero" al comunicador Joaquín López Dóriga. Como pólvora corrió la opinión de unos y de otros, ya sea defendiendo la libertad de expresión o bien cuestionando que el Presidente de la República incurra en esas prácticas. Pero el que sí concitó todas las críticas fue Jenaro Villamil, por el hecho de replicar el episodio en su calidad de director del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano.
Navidad, tan roja como el semáforo
Con semáforo rojo en la CDMX y el Estado de México, bajo declaración de emergencia sanitaria en Morelos y alerta máxima en Hidalgo, Querétaro, Puebla y Tlaxcala, una zona conurbada de al menos 40 millones de habitantes pasará Navidad y Año Nuevo bajo una situación histórica en la que supuestamente se restringirán las reuniones. Si a esta situación de emergencia se suman en las próximas horas los 24 estados que se encuentran en "riesgo alto", según el indicador oficial, estaremos ante una cifra aproximada de cien millones de mexicanos que deberán dejar de visitar a sus parientes durante la época navideña. ¿Será que podrán más los semáforos que la fiesta?
Frena… las vacunas
Como virus informático se esparció ayer el mensaje navideño de Gilberto Lozano, líder del denominado Frente Nacional AntiAmlo (Frenaaa), en el que cuestiona ahora no sólo la presencia de López Obrador, sino al imperio de las vacunas, en las que dijo no creer. Además, ataviado con un cuello de tortuga y un saco beige, en una sala decorada con un crucifijo, un árbol navideño y un piano de cola, también se refirió a la decadencia que, acusó, se vive en Nuevo León, con una "gánster del PRI", que se impuso sobre "solovinos y mascotas" en el partido del Presidente. Y ya como colación, y más allá de las descalificaciones contra el "morenavirus", lanzó un llamado a la población a no generar impuestos, apoyar que se rompa el pacto fiscal federal y presionar a los diputados locales.