Claudia Olguin

Tendencias inmobiliarias post pandemia

Hoy se consideran a las personas con diferencias neurológicas como la dislexia, el autismo y el TDAH en la ecuación del diseño de los espacios.

Los últimos 3 años han sido una revolución en el negocio inmobiliario. Un lapso de desafíos y oportunidades donde nichos como los espacios orientados a la neurodiversidad, la vivienda unifamiliar en renta y los inmuebles enfocados a la salud detonaron su crecimiento.

Dado que como nunca el ser humano ha sido puesto en el centro de los inmuebles, firmas globales se han dado a la tarea de ubicar las tendencias que norman el mundo inmobiliario.

Una de ellas es cómo más allá de la equidad e inclusión, existen otras formas de diversidad. Se trata de cómo hoy se consideran a las personas con diferencias neurológicas como la dislexia, el autismo y el TDAH en la ecuación del diseño de los espacios.

La razón, como lo sugiere un estudio global de Cushman & Wakefield (C&W), radica en este caso en que los cerebros interpretan los entornos físicos de manera distinta, el diseño de los entornos intencionales, sensibles a los sentidos y amigables con el cerebro acercan la necesidad a la creación de espacios de trabajo diversos, equitativos e inclusivos para empoderar a este grupo de personas que representan en el mundo entre 15 y 20% de la población.

Se trata de la manera en que los espacios apoyan la salud mental y bienestar de todos, incluso los colaboradores neurodivergentes. Existen, según este análisis, 8 formas prácticas para mejorar la experiencia en el lugar de trabajo a través de un diseño sensible a los sentidos y amigable con el cerebro.

Parte de la solución se enfoca en los criterios que ya se utilizan a través de estándares como el WELL, que incluyen aspectos como el clima, el diseño acústico, sistemas de filtración de aire, luz circadiana, patrones de diseño amigables, áreas despejadas y de orientación predecible, así como tecnología inclusiva.

En el ámbito de los negocios que ganaron espacio con la pandemia, destaca sin duda para mercados desarrollados los proyectos de vivienda unifamiliar en renta, que en México ha detonado conceptos de coliving.

Esto se origina en la evolución que han experimentado zonas alejadas de las ciudades, luego de que un gran número de personas abandonaron las zonas urbanas congestionadas.

La salida hacia el espacio suburbano donde acomodar el trabajo y la escuela remotas, hizo que el inventario de viviendas se redujera y los precios se dispararon con guerras de oferta.

En consecuencia y aunque en el caso de México, mercados como Valle de Bravo han mantenido una posición distinta a la de zonas en Estados Unidos, es un hecho que esta tendencia crece de tal forma que ante el aumento de precios, la demanda de viviendas unifamiliares en renta se disparó.

La data recabada por C&W indica que en 2021 se construyeron más de 60 mil unidades del tipo en mercados como Memphis, Oklahoma, Forth Worth. Aquí los alquileres unifamiliares antes deseables en ciudades como Austin, ahora generan que el valor de estas viviendas haya aumentado 38% el año pasado, mientras que las tasas de alquiler aumentarán 6%.

Se trata de una tendencia que va más allá de los pronósticos orientados a generaciones como los millennials y que ahora siguen profesionales de media carrera y jubilados, atraídos por este tipo de inmuebles que ofrecen un estilo de vida unifamiliar sin compromisos de largo plazo, mantenimiento y carga financiera que demanda una propiedad.

Desde luego que no menos importante es el avance que dejó en la industria médica, los avances tecnológicos. Desde las aplicaciones de monitoreo y regulación de diabetes hasta los robots que realizan cirugías o las impresoras que personalizan moldes de brazos.

La atención generada en este lapso hacia las tecnologías médicas  (MedTech) y su mejoramiento aceleraron la demanda de espacios que cubran necesidades de esta industria como el acceso global a internet a través de dispositivos móviles y el equipo de cómputo en la nube.

Se pronostica que el crecimiento liderado por empresas como Apple, Google y Medtronic tendrá un efecto dominó en los bienes raíces comerciales. Se estima que en los últimos cinco años, las empresas de MedTech firmaron más de 11.4 millones de pies cuadrados en contratos de arrendamiento en distintos mercados de Estados Unidos.

Estas tres tendencias se expanden rápidamente en los mercados y forman parte de la transformación experimentada en los años de pandemia. Es un tema que impacta los mercados en México y que quienes tomen ventaja podrán sumarse al grupo de los ganadores de este retador período.

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