Bloomberg Opinion

La guerra fría tecnológica obligará al mundo a elegir

Al igual que el mundo se dividió por líneas militares hace 70 años, el telón de acero digital obligará a los líderes políticos a decidir si son Equipo China o Equipo EU.

Por Tim Culpan

La guerra fría de Estados Unidos y China está a punto de extenderse, y eso obligará a los líderes a tomar algunas decisiones difíciles.

Se dibujó una cortina de hierro digital cuando el presidente Donald Trump decidió aislar a Huawei. En una semana, las corporaciones globales se vieron atrapadas en esta división.

Es probable que se forme una división más lenta, pero más importante, entre países a medida que caiga esta cortina de hierro digital. Tener esferas tecnológicas mutuamente excluyentes no significa simplemente que las cadenas de suministro se reflejen entre sí en diferentes continentes. Más bien, para los países de todo el mundo, significa que cada decisión de negocios e inversión se convierte en una decisión política.

La tecnología de EU sigue liderando el mundo, y lo seguirá haciendo durante un tiempo. Pero China ha demostrado estar dispuesta a comprometerse y ayudar a los países en desarrollo de una manera que alguna vez lo hizo EU. Es probable que continúe la construcción o el subsidio de redes de comunicaciones fijas y móviles hechas por Huawei y ZTE Corp., pero financiadas directa o indirectamente por Beijing.

No se trata solo de redes de alta tecnología. Numerosos países en desarrollo desean líneas ferroviarias de alta velocidad, puertos y aeropuertos eficientes y vehículos eléctricos. Cada uno de estos podría ser proporcionado por EU o sus aliados; Japón, Europa y Canadá tienen la tecnología y la habilidad para ayudar. Pero además de ser capaz de ofrecerlos, China tiene el capital político y económico para hacerlo. La voluntad ya existe en la forma de su Iniciativa del Cinturón y Ruta de la Seda

Pero si una nación acuerda instalar redes o infraestructura china, existe una posibilidad cada vez mayor de que se le aísle a los productos estadounidenses. Filipinas y Vietnam personifican esta dicotomía.

Filipinas ha tenido históricamente vínculos estrechos con EU. Sin embargo, bajo la presidencia de Rodrigo Duterte, se han firmado más de una docena de acuerdos con China, incluido uno para que China Telecom construya una red de telefonía móvil en Filipinas.

Vietnam, por el contrario, parece ser un aliado chino natural. Sin embargo, el comportamiento asertivo de Beijing no le ha ganado cariño entre los vietnamitas, mientras que tienen una disposición relativamente cálida hacia Estados Unidos. Cuatro décadas después de que terminara la brutal guerra, las dos naciones están construyendo lazos militares mientras Vietnam trata de contener la marea de la creciente potencia china.

Tales decisiones deberán tomarse en todo el mundo. Probablemente no se presentarán en discursos desde un podio. En su lugar, se tomarán en las salas de reuniones de las instituciones burocráticas, en las reuniones del gabinete y en las embajadas extranjeras.

Al igual que el mundo se dividió por líneas militares hace 70 años, el telón de acero digital obligará a los líderes políticos a decidir si son Equipo China o Equipo EU.

Tim Culpan es un columnista de Bloomberg Opinion que cubre tecnología. Anteriormente cubrió tecnología para Bloomberg News.

COLUMNAS ANTERIORES

Mercado de renta fija en América Latina: una historia de crecimiento
La dura verdad es que consumimos más petróleo que nunca

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.