Desde San Lázaro

SLP, entre el desarrollo y su inexorable destino

Para nadie es un secreto que la relación que existe entre el presidente López Obrador y el gobernador Carreras es de primera y que con el paso de las visitas que ha tenido a la entidad se ha ido fortaleciendo.

Mientras que la mayoría de los estados del país están sumergidos en una espiral de crisis económica y de insolvencia, hay varias entidades que gozan de niveles de crecimiento económico por arriba del 4.0 por ciento del PIB. Tal es el caso de San Luis Potosí, cuyo gobernador Juan Manuel Carreras López propicia que la iniciativa privada despliegue todas sus capacidades para hacer crecer a las empresas, merced al ambiente de confianza y de respeto al Estado de derecho que prevalece en SLP.

EL crecimiento de 4.23 por ciento del PIB que tuvo San Luis Potosí el año pasado es notable, como también es el hecho que la inversión privada alcanzó niveles inéditos en la entidad con ocho mil millones de dólares.

De hecho, esta entidad forma parte de la Alianza Centro Bajío Occidente (ACBO), que está conformada por Aguascalientes, Guanajuato, Jalisco y Querétaro, que se han agrupado para impulsar el desarrollo integral, lograr la más alta competitividad, usar la economía digital, convertir la educación, ciencia, tecnología e innovación en la palanca de crecimiento, así como fomentar el empleo la sustentabilidad y bienestar social.

Falta un poco más de año y medio para que Carreras concluya su gestión y por delante tiene retos formidables; sin embargo, lo relevante es que ha encaminado a SLP por la ruta del crecimiento y de un ambiente de paz y tranquilidad en donde la inseguridad se mantiene en niveles razonablemente controlados.

El activismo desplegado por el gobernador potosino le hizo merecedor del nombramiento como vicepresidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).

Para nadie es un secreto que la relación que existe entre el presidente López Obrador y el gobernador Carreras es de primera y que con el paso de las visitas que ha tenido a la entidad se ha ido fortaleciendo en bien de los mismos potosinos.

En el ámbito político ya comenzó la grilla barata por la sucesión de Carreras. A esos ansiosos habría que recordarles que al gobernador no le gustan los aceleres y menos los de su gabinete. También habría que considerar dos factores de peso para encontrar la luz en el camino. El primer elemento es que la Presidencia del país la ocupa un personaje ajeno al PRI y que necesariamente tendría que avalar al sucesor del actual gobernador. Así es, estimado lector, aunque parezca de risa loca, toda vez que el partido tricolor enfrenta una de sus mayores crisis existenciales de su historia, a grado tal que en la elección intermedia de 2021, perderá su registro en SLP.

El segundo factor es regional; el PAN con dos gallos de espolones pretende recobrar el estado y no hay que descartar que esto sea factible, toda vez que la división que prevalece entre los eventuales abanderados de Morena podría abrir la puerta a los azules.

Si en algún estado están polarizadas las huestes de Morena es SLP.

Lo que es innegable es que el ganador recibiría un auténtico premio al gobernar uno de los mejores estados del país en cuanto a desarrollo y calidad de vida.

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