Las Encuestas

Víctimas jóvenes

La pérdida de empleo, la inseguridad y la corrupción la sufren más los jóvenes menores de 30 años.

La economía, la inseguridad y la corrupción destacan como las principales preocupaciones de los mexicanos, por lo cual resulta relevante saber quiénes y cuántos han sido víctimas de condiciones económicas adversas, del crimen o de las prácticas de corrupción, y cómo eso impacta en la evaluación al gobierno actual.

En la reciente encuesta de El Financiero, realizada en junio, le preguntamos a los 820 entrevistados a nivel nacional si en los últimos tres meses ellos o algún familiar cercano habían experimentado las siguientes cosas: quedarse sin empleo o fuente de ingresos, haber sido víctima de algún delito, o haber tenido que dar una mordida o soborno.

Juntando las respuestas afirmativas, que incluyen haber experimentado personalmente o a través de un familiar (o ambas), el 25 por ciento reportó pérdida de empleo, el 21 por ciento sufrió algún delito y 11 por ciento admitió haber tenido que dar una mordida. En otras palabras, uno de cada cuatro mexicanos sufrió el desempleo en su hogar, uno de cada cinco el crimen, y uno de cada diez la corrupción. Entre esos tres tipos de victimización, el económico luce como el más fuerte.

Pero estas proporciones no son las mismas entre distintos grupos sociales: según la encuesta, los jóvenes han sido los más vulnerables a estos tipos de victimización. Entre los entrevistados de 18 a 29 años de edad, la pérdida de empleo o fuente de ingresos asciende a 33 por ciento, comparado con 24 y 18 por ciento entre los grupos de 30 a 49 años, y de 50 o más, respectivamente.

La proporción de víctimas del crimen es de 30 por ciento entre los jóvenes, contrastando con 20 y 16 por ciento en los otros dos grupos de edad. Y el 19 por ciento de los menores de 30 años reportó haber tenido que dar una mordida, frente al 10 y 5 por ciento entre los grupos de más edad.

Estos datos revelan que la pérdida de empleo, la inseguridad y la corrupción las sufren casi el doble de los jóvenes menores de 30 años, comparados con los mayores de 50 años de edad. Las principales víctimas de las principales problemáticas nacionales tiene un rostro joven.

Pero eso no es todo. En algunas regiones del país también se reportan mayores niveles de victimización que en otras. La pérdida del empleo o victimización económica es mucho más notable en la región centro-occidente, según la encuesta, donde alcanza el 33 por ciento, mientras que en el norte es de 19 por ciento, y en el centro y el sur de 25 por ciento.

La victimización ante el crimen también es más alta en el centro-occidente, alcanzando 26 por ciento, un nivel más alto que en el norte, con 20 por ciento, o el sur con 19 por ciento, aunque en el centro es de 23 por ciento.

Finalmente, las mordidas también son ligeramente más altas en la región centro-occidente, con 14 por ciento, seguida del centro con 13 por ciento, el sur con 10 por ciento y el norte con apenas 8 por ciento.

¿Tiene todo esto algún impacto en el apoyo popular al presidente López Obrador y su gobierno? Al parecer sí, al registrarse que los jóvenes menores de 30 años son el grupo de edad que más desaprueba la gestión del presidente, y, asimismo, la desaprobación alcanza su nivel más alto en la región centro-occidente.

Según la encuesta, el 59 por ciento de los menores de 30 años aprueba la labor del presidente, mientras que el 41 por ciento la desprueba. La aprobación y desaprobación es de 60 y 38 por ciento entre los de 30 a 49 años, y de 69 y 28 por ciento entre los mayores de 50 años. Por regiones, la aprobación más alta se registra en el sur, con 73 por ciento, seguida del centro con 65 por ciento, el norte con 57 por ciento y el centro-occidente, con 55 por ciento.

Por lo visto, tanto el grupo social como la región geográfica que más han padecido el desempleo, el crimen y la corrupción en estos meses, son los que menos aprobación otorgan a la labor del gobierno.

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