Mis Finanzas

¿Qué hacer ante el desplome de los ingresos?

El punto central es analizar con tranquilidad y evitar el pánico con decisiones apresuradas e impulsivas.

Para algunos, la pandemia del coronavirus ha significado 'solamente' el acostumbrarse a laborar en casa. Sin embargo, a otros les cuesta su equilibrio financiero, con casos de desesperación de personas que vivían al día y ahora son insolventes, desde trabajadores informales hasta profesionistas libres o empresarios que perdieron de súbito sus ingresos y dejan de pagar los compromisos contraídos con empleados, proveedores y bancos.

Quisiera dar una receta mágica para aliviar el encontronazo económico, pero no existe. Menos, si el gobierno federal se niega a lanzar un programa serio de apoyo para la iniciativa privada.

El punto central es analizar con tranquilidad y evitar el pánico con decisiones apresuradas e impulsivas. Habrá que pensar en el horizonte de tiempo de la crisis y eso estará en función de la actividad desempeñada. Es decir, hacer un pronóstico de cuál es el lapso máximo que podríamos mantener la situación y cómo afectará a los ingresos; incluso, suponer escenarios.

Por ejemplo, si creemos que para mayo está normalizado; la pregunta es si tenemos la liquidez para soportarlo. Pero qué pasa si se extiende a junio o hasta septiembre. Aun cuando no se desee dicho entorno es conveniente poner las opciones sobre la mesa para tener claridad de planeación.

Estos momentos son bifurcaciones en nuestras resoluciones de vida, al cuestionarnos si debemos seguir con lo que hacíamos o cambiamos de giro. Si las cosas iban mal antes de toda la hecatombe del Covid-19, bien podría ser un buen justificante para liquidar y ser valientes con el fin de buscar nuevos retos.

Al elegir quedarnos en la actividad, habrán de identificarse las alternativas para sortear el proceso y también para rediseñar, porque considero que el mundo completo modificará la forma de hacer negocios y comercializar. De hecho, podríamos encontrar oportunidades en la medida que se aclare el panorama.

Por ejemplo, si iba rápido la comercialización vía internet, con esto, se aceleró de manera impresionante. Las tiendas virtuales no se dan a basto y contratan personal para enfrentar las exigencias de sus clientes en la entrega.

También quedó de manifiesto la dependencia con proveedores de otros países en la línea de producción. Estoy seguro de que las compañías intentarán reducir el riesgo utilizando insumos nacionales, siempre y cuando cumplan con los estándares y precios requeridos.

El tema da para más y me permitiré continuar en la próxima columna.

¿Cómo te afecta la contingencia de salud? Coméntame en Instagram: @atovar.castro

Alberto Tovar

Alberto Tovar

Economista, especializado en negocios y finanzas personales; certificado como coach de vida y equipos. Actualmente es el Director Regional de la Zona Norte de El Financiero. Ofrece conferencias, consultoría y coaching a organizaciones diversas.

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