New York Times Syndicate

El arte digital se puede colgar en la pared

En un mundo dominado por el internet y la cultura visual, el arte debe adecuarse hacia ciertas exigencias. ¿Por qué no pensar, por ejemplo, en colgar una obra de arte digital en la pared de tu casa o un museo? 

A Jake Levine, un emprendedor en Nueva York, le gusta el tipo de arte que tiende a ser popular en internet – fotografías ingeniosamente manipuladas en Photoshop, e imágenes animadas como GIFs – y quería una forma de sacarlo de su computadora y ponerlo en una pared. Pero, ¿cómo se cuelgan los pixeles en una pared?

Consideró sus opciones. Sí, los marcos de imágenes digitales eran poco costosos y estaban ampliamente disponibles, pero tendían a ser pequeños y poco sofisticados. Y parecía un derroche colgar una tableta o un monitor costoso en una pared, donde sería tentador usar el aparato para navegar por internet o ver películas en lugar de disfrutar de una pieza de arte.

Eventualmente, armó un lienzo digital usando un monitor poco costoso y una computadora llamada Rasperry Pi. El monitor era controlado por una sencilla aplicación web que le permitía seleccionar imágenes en línea y cambiarlas instantáneamente, con un clic.

Fue lo bastante prometedor para que Levine decidiera renunciar a su empleo como gerente general de Digg, un sitio nuevo para enfocarse en construir estas pantallas de tiempo completo.

Levine llamó a su compañía Electric Objects y recaudó 1.7 millones de dólares a través de una ronda semillero de financiamiento aventurero en abril para rentar una oficina y contratar empleados.

Para generar retroalimentación, también usó el dinero para construir y enviar un ciento de prototipos a otros emprendedores y artistas. Planea vender una versión pulida de su prototipo por 299 dólares a fines de este año.

La primera vez que escuché de la compañía, no estuve segura de que el concepto tuviera un atractivo de mercado más amplio, en gran medida porque no estoy convencida de que la gente quisiera más dispositivos con pantallas en sus casas. Como alguien que posee una tableta, un smartphone y una laptop, definitivamente yo no querría. Incluso me he resistido a comprar un televisor. Pero después de ver un prototipo, quedé impresionada por la sencillez de la máquina. Y si la gente está dispuesta a comprar dispositivos independientes para reproducir música, monitorear su salud y ayudarles a manejar sus casas, ¿por qué no comprar uno para la cultura y el arte?


UN MERCADO EN ASCENSO


Levine no es el único emprendedor que ve un mercado aquí. Varios competidores, incluidos Instacube y FRM, están trabajando en enfoques similares para las instalaciones digitales para el hogar.

Yugo Nakamura, co-fundador y director creativo de FRM, dijo que veía su marco digital como un servicio para los creadores y los fanáticos de la cultura visual.

"Si vemos hacia el futuro, las pantallas serán vistas como un medio dominante como el lienzo lo fue por siglos. Es lo que creamos con estas herramientas lo que será más recordado", señaló. 

Aseguró que la gente se sentiría atraída hacia el arte que la pantalla fomenta, y no solo el dispositivo mismo. El hardware es secundario ante el arte. "No estoy seguro si nuestro experimento 'regirá al futuro' por decirlo así, pero el momento parece oportuno", afirmó.

Tanto Levine como Nakamura planean cultivar redes de artistas que creen obras exclusivamente para las pantallas, las cuales la gente pudiera comprar a través de una tienda en línea. El objetivo mayor no es simplemente reproducir fotos y pinturas famosas, sino apoyar a una comunidad creciente de artistas que crean animaciones e imágenes por computadora. 

"La razón de que la gente no esté pagando por el arte digital es porque la experiencia no se siente viable", sostuvo Levine. "Debemos sacar el arte de Internet". 

Zoë Salditch, una curadora que ha experimentado trabajar con artistas experimentales y de nuevos medios, está desarrollando la red de artistas de Electric Objects. Dijo que usar las pantallas para exhibir arte interactivo o digital era bastante común en el mundo del arte, pero no aún entre los consumidores.

"Todo el tiempo se ve este tipo de dispositivo en una versión amateur en las galerías", comentó. Pero puede ser difícil y caro para los aficionados al arte que no tienen antecedentes en hardware y software para recrearlo.

Salditch está trabajando en crear un programa de "artistas residentes" a través de la compañía que proporcione un estipendio y un prototipo de la pantalla a varios artistas digitales, para alentarlos a crear piezas diseñadas específicamente para el dispositivo.

Robin Sloan, autor de una novela futurista llamada "Mr. Penumbra's 24-Hour Bookstore", ha estado jugueteando con un prototipo de Electric Objects. Dice que este tipo de dispositivos hacen el juego a nuestra actual fascinación cultural con la creación de imágenes y el hecho de compartirlas en sitios como Facebook, Pinterest, Instagram y Tumblr, pero en una forma mucho más significativa.

"Todo el Internet social está construido con base en imágenes. Y no se puede negar que todos estos sistemas parecen querer es que consumamos más imágenes, más rápidamente, todo el tiempo. Lo cual termina siendo un poco repugnante", indicó. 

1

También lee: