New York Times Syndicate

36 horas en Savannah, Georgia

Muchos creen que esta ciudad es antigua, anquilosada y poco atractiva. Pero eso es sólo un estereotipo. En sus calles hay una gran diversidad de atractivos turísticos. Aquí te ofrecemos una guía para disfrutarlos. 

Algunos de los atractivos más famosos de Savannah (cementerios musgosos, mansiones antiguas, recorridos con historias de fantasmas) dan la engañosa impresión de que la ciudad es un macabro vestigio de su ilustre pasado.

A decir verdad, Savannah está vivita y coleando: ¿Cómo no estarlo cuando una franja grande del centro histórico disfruta de políticas liberales para la venta de bebidas alcohólicas en contenedores abiertos que hacen que go-cup (vasos para llevar) sea un término popular en el léxico local?

1
VIERNES

3:30 p.m.

Energía artística


La creatividad que emana del Colegio de Arte y Diseño de Savannah (SCAD, por sus siglas en inglés) se exhibe en varias galerías esparcidas por la ciudad, pero ninguna puede competir con el Museo de Arte SCAD, que develó en 2011 una ambiciosa expansión de 26 millones de dólares que fue construida en las ruinas de una estación de trenes de antes de la guerra. La elevada entrada, coronada con una torre revestida en vidrio, lleva a una serie de galerías que muestran obras contemporáneas en una amplia gama de técnicas. Recientemente fue presentada una colección de vestidos Oscar de la Renta dirigida por André Leon Talley junto a una exhibición individual de Nari Ward de obras creadas con objetos recuperados como agujetas de zapatos y pilas usadas. Una galería independiente del recinto está dedicada a obras de egresados del SCAD.

6:30 p.m.

Georgia gourmet


El paisaje culinario local afortunadamente ha evolucionado de sus raíces de cocina casera cargada en mantequilla. Para comprobarlo, reserve una mesa en Local 11ten, un restaurante que está reimaginando la cocina sureña con mariscos capturados en la costa y verduras cultivadas en granjas cercanas. Antes de cenar, estimule el apetito con un gimlet de albahaca en Perch, el bar de la azotea del restaurante, entre copas de árboles envueltos en musgo español. Después, baje las escaleras con destino al salón principal, un espacio iluminado con velas que anteriormente albergó a un banco, para cenar especialidades de temporada; platillos destacados recientes incluyeron mejillones picantes con chorizo casero y codorniz asada a la sartén extendida sobre confit de panza de cerdo y arroz Carolina cremoso.

11 p.m.

Tragos eclécticos


Savannah adora sus tragos, así que no hay escasez de lugares eclécticos para beber. En un callejón trasero cercano al río, una imponente puerta de madera es la discreta entrada a Mata Hari, un salón tipo taberna ilegal. Atravesar este portal significa entrar a una era del pasado donde cantineros con vestimenta atrevida sirven martinis detrás de un hermoso bar, y donde el entretenimiento de la noche podría incluir un espectáculo de cabaré. Después, únase al reparto de personajes locales que acechan en Pinkie Master's Lounge, un tugurio donde la rocola toca álbumes oscuros de la década de 1980 y donde todo mundo bebe latas grandes de PBR.

1
SÁBADO

10 a.m.

Beneficios del parque


Empiece el sábado con un paseo por el Parque Forsyth, una hermosa extensión de poco más de 12 hectáreas cuyas grandiosas pasarelas bordeadas por árboles atraen a todos, desde paseadores de perros hasta músicos que tocan el violín en la calle. Continúe pasando frente a campos herbosos y una fuente de ornato enmarcada por robles antiguos hasta el extremo sur del parque, que ha cobijado al Mercado de Productores Forsyth desde 2009. Ahí encontrará café preparado con granos tostados a unas cuadras de distancia, bolsas de nueces recolectadas en patios de Savannah y vendedores de todo tipo de cosas, desde hierbas aromáticas y productos recién traídos del campo hasta arroz cosechado en una plantación colonial situada del otro lado de la frontera con Carolina del Sur.

Medio día

Comedor australiano


La luz del sol entra por las grandes ventanas de Collins Quarter, una cafetería de inspiración australiana que se convirtió instantáneamente en un sitio favorito local luego de abrir en agosto de 2014. El espacio es precioso (banquetas color rojo cereza, mesas de mármol blanco, techos altos, paredes con ladrillo aparente, pisos con azulejos de mosaico) y hay sillas adicionales en el exterior. De acuerdo con un estilo verdaderamente australiano, los baristas son habilidosos para preparar aterciopelados cafés estilo flat white. Pero la cocina es aún mejor, sirviendo platos como aguacate machacado con cítricos sobre gruesas rebanadas de pan tostado aderezadas con un colorido popurrí de tomates del huerto familiar, rábano rayado, verduras pequeñitas, queso feta desmoronado y un huevo perfectamente escalfado.

2 p.m.

Paseo de cervecerías


Regulaciones anticuadas de la era de la Ley Seca, que prohíben que las cerveceras vendan sus productos en el lugar, han obstaculizado a la cultura de cervezas artesanales de Georgia. Pero tres cervecerías locales esquivan este obstáculo vendiendo vasos de recuerdo que ofrecen degustaciones gratuitas. Empiece su paseo de cervecerías en Service Brewing Co., que pertenece y es operada por veteranos; los recorridos por el cavernoso lugar son supervisados por Black Hawk, el gato de la cervecería, mientras que la equilibrada Compass Rose IPA se sirve en espitas bajo una prominente bandera de Estados Unidos. En la vecina Southbound Brewing Company, únase a la multitud que prueba variedades fáciles de beber como la cítrica Scattered Sun Belgian Wit.

6:30 p.m.

Repetición humeante

Para satisfacer el antojo por lo mejor, la carne asada estilo Memphis solía conllevar un viaje de 13 kilómetros al triste centro comercial que alberga a Sandfly BBQ. Pero en febrero, este restaurante familiar actualmente manejado por Keith Latture, un chef nativo de Memphis con formación clásica, abrió una segunda ubicación en el histórico Distrito Victoriano, a pasos del Parque Forsyth. El atmosférico nuevo lugar está en el viejo Streamliner Diner, un coche comedor clásico con asientos frente al mostrador y cubículos acogedores donde podrá sumergirse en los mismos deliciosos emparedados de carne de cerdo deshebrada, platos de falda de res, tiernas costillas y coles que se sirven en el sitio original.

1
DOMINGO

11 a.m.

Tiendas de dulces

Hay una dulzura irresistible mezclada en muchos de los negocios que están sobre la calle Broughton. En Savannah Bee Company, especialistas en miel lo guiarán por degustaciones de miel blanca batida y panal crudo acompañado con queso azul. También hay un sinnúmero de productos de belleza con cera de abeja y un bar en un área nueva que sirve muestras de aguamiel, la antigua libación de miel fermentada. Ahí cerca, Chocolat by Adam Turoni exhibe golosinas hecha a mano tan hermosas como raras, como las trufas de chocolate negro "en explosión" rellenas con Pop Rocks.

1 p.m.

Bollos para el almuerzo

La atmósfera económica quizá evoque a un McDonald's, pero Sly's Sliders and Fries sirve comida a pedido creada con verdadera habilidad culinaria. En este sencillo restaurante, que abrió el año pasado en un vecindario en evolución localizado al sur del distrito histórico, los elementos destacados del menú son los panecillos con rellenos que incluyen falda ahumada y albóndigas italianas. Ordene varios, incluyendo al menos un delicioso Banh U Banh Mi, un pan suavemente tostado untado con mayonesa de cilantro y relleno con rábano, zanahoria, pepino y camarones fritos con tempura.

2:30 p.m.

Hora de la isla

Es fácil olvidar lo cerca que está la ciudad de la costa atlántica. Pero tome la Ruta 80 con dirección al Este y en aproximadamente 20 minutos estará manejando sobre el puente hacia la Isla Tybee. Con amplias franjas de playa arenosa, la diminuta isla barrera de poco menos de ocho kilómetros cuadrados es un refugio favorito entre los residentes de Savannah que buscan el sol. Siga los letreros que llevan al faro, una torre blanca y negra de la era colonial con vistas panorámicas a North Beach.

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