Los ambientes dominados por la violencia, la corrupción, el tráfico de drogas y la precariedad pueden llevar a la resignación, alertó este martes el papa Francisco en una misa celebrada en Morelia, Michoacán.
"¿Qué tentación podemos tener frente a esta realidad que parece haberse convertido en un sistema inamovible? Creo que podríamos resumirla con la palabra resignación", dijo el pontífice.
"Una de las armas preferidas del demonio, la resignación (...) Una resignación que nos paraliza y nos impide no sólo caminar, sino también hacer camino; una resignación que no sólo nos atemoriza, sino que nos atrinchera en nuestras sacristías y aparentes seguridades (…) Una resignación que no sólo nos impide proyectar, sino que nos impide arriesgar y transformar", agregó en la ceremonia realizada en el estadio Venustiano Carranza.
Michoacán es uno de los estados de México más azotados en los últimos años por el crimen organizado y la violencia.
"Por eso, Padre nuestro, no nos dejes caer en la tentación", dijo el Papa en la misa realizada ante miles de michoacanos.
Francisco dijo que en los momentos de tentación es bueno apelar a la memoria, mirar la 'madera' de la que fuimos hechos.
"No todo ha comenzado con nosotros, no todo terminará con nosotros, por eso cuánto bien nos hace recuperar la historia que nos ha traído hasta acá".
En este sentido el Papa recordó a Vasco de Quiroga, primer obispo de Michoacán, de quien destacó que como evangelizador no cayó en la resignación ante la realidad en la que vivían los indios purépechas, muchas veces vejados.
"Movió su compasión y lo impulsó a realizar diversas propuestas que fuesen de 'respiro' ante esta realidad tan paralizante e injusta".
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