CIUDAD DE MÉXICO.- El exsecretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont afirmó que al no haber una política clara sobre el consumo de la mariguana, afecta la ética de las fuerzas de seguridad y las pone en riesgo de caer en la corrupción.
"En un tema sobre la prohibición de la cannabis, poner a nuestras fuerzas de seguridad a respaldar una prohibición que no tiene un respaldo social político claro, es un tema que afecta a la ética de nuestras fuerzas de seguridad, que las pone a regular zonas grises en donde muchos entran en el riesgo de la corrupción y su intervención genera riesgos personales", dijo.
Al participar en el quinto y último Foro Nacional sobre el uso de la mariguana, Gómez Mont aseveró que "nadie cuestiona la necesidad de reforzar la seguridad democrática en este país para defender a los débiles de la violencia, de los agresivos, de los secuestrados, de las extorsiones, de los homicidios… porque uno de los deberes esenciales de un Estado moderno es proteger a sus ciudadanos y proteger a los pacíficos y a los más vulnerables, esa es la lógica de la democracia".
Pero, "cuando sometemos esta decisión a un respaldo ambivalente se es injusto con nuestras fuerzas de seguridad que toman riesgos personales todos los días para respaldar el estado de derecho".
Resaltó que "si al final el respeto de los derechos humanos pasa por un estado de derecho que abata corrupción, violencia e inequidad -porque hay otras fuerzas que le corresponden a la política-, pero estas le corresponden al estado de derecho, este debe pasar por un esquema de prohibiciones claras y con un amplio respaldo social y político".
Gomez Mont subrayó que uno de los problemas que afecta la prohibición de la mariguana en su esquema actual, es que todos los centros sobre los cuales se puede establecer la curación de adictos están pavimentados por la vergüenza.
Dijo que no están abiertos los caminos en los centros de recuperación de la adicción ni operan con todo el apoyo social e institucional que debiera para resolver el problema del consumo que en el caso de la cannabis es del nueve 9 por ciento, menos del 10 por ciento, y al tratar de ocultarse el problema en un enfoque prohibitivo -porque la prohibición todo lo oculta-, se complican los caminos para la recuperación de los adictos.
"Los policías no saben de adicciones, los trabajadores sociales y los centros de recuperación de adictos sí. En datos más visibles como es el consumo del alcohol o del tabaco se pueden ver mejoras que no están pavimentadas por la vergüenza pero en el caso de narcóticos sí lo están", dijo.
Comentó que "hay razones sobre las cuales se asume que una regulación distinta de la cannabis va a tener efectos sobre todo en materia de seguridad respecto de los derechos humanos, excarcelaciones y un ámbito distinto de encuentro entre las fuerzas de seguridad y las organizaciones criminales".
"Hay muchas expectativas rodeando el tema, yo creo que algunas exageradas, pero esta es una cuestión que solo en el tiempo puede ir perfilando sus beneficios y mitigando los males a que está llamada a evitar", destacó.
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong clausurará el último foro sobre el uso de la mariguana al filo de las 14:00 horas.