CIUDAD DE MÉXICO.- El Partido Revolucionario Institucional
(PRI) gastó 3.5 millones de pesos por aplicar a sus candidatos el polígrafo y el antidoping en las elecciones del año pasado, de acuerdo con la relación de contrataciones del partido correspondiente a 2015.
Según ésta, el partido pagó esa cantidad al Instituto Latinoamericano de Poligrafía.
En abril de 2015, Sadot Sánchez Carreño, director jurídico del PRI, anunció que pruebas toxicológicas, psicométricas y poligráficas se habían practicado a sus candidatos y, en ese entonces, también a sus dirigentes, César Camacho e Ivonne Ortega.
En total, las pruebas fueron practicadas a alrededor de 600 candidatos pero los resultados no fueron revelados.
La intención del PRI al aplicar estas pruebas era garantizar la probidad de quienes buscaron una curul en esa elección.