CIUDAD DE MÉXICO.- Activista de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), apoyador de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) y vinculado a grupos guerrilleros, Francisco Martínez Neri arrebató el poder político –y económico– al Partido de la Revolución Democrática (PRD) dialoguista y conciliador en la Cámara de Diputados.
Tildado de político "chapulín", por sus propios compañeros de bancada, llamado servidor público "plurinominal" por cobrar en diferentes nóminas al mismo tiempo –como funcionario estatal, como maestro universitario y como diputado local–, el nuevo delfín político del gobernador Gabino Cué ya hasta se enfila como el más fuerte aspirante a la gubernatura en Oaxaca.
En una cerrada elección regional, el diputado federal ganó con un total de 23 mil 522 votos –23.01por ciento–, contra 23 mil 327 –22.82 por ciento– de su más cercana contrincante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Beatriz Rodríguez Casanovas.
Como secretario de las Culturas y las Artes del estado, Martínez Neri escribió en Twitter, el 20 de mayo pasado: "Buenos dias #Oaxaca les deseo un exitos dias"; mientras, el 26 de septiembre de 2014, cuando presentó las convocatorias literarias de la Colección Parajes, Colección Infantil y Juvenil y el Premio Internacional, Cuento Mito y Leyenda "Andrés Henestrosa" 2014, en la Biblioteca Central señaló que "en Oaxaca casi nadie lee ni escribe", por lo que su sola designación como coordinador parlamentario en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión ya provocó la ruptura del gobernador Cué con otros grupos perredistas locales.
Por lo pronto, el senador Benjamín Robles aceleró su rompimiento con el gobernador estatal y prepara su salida del PRD para irse a Morena.
Para más de un legislador de su propia bancada federal perredista, el discurso de Martínez Neri de honestidad, transparencia y del combate a la corrupción "se desvanece", cuando –aseguran– ni como funcionario ni como legislador estatal presentó su declaración patrimonial.
Martínez Neri cobraba como secretario de las Culturas y las Artes de Oaxaca –al mismo tiempo que lo hacía como profesor de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UBJO)–, y de igual manera lo hizo como legislador local y como maestro.
De su pasado reciente, los legisladores del sol azteca recuerdan sus nexos con grupos subversivos y guerrilleros durante el conflicto del 2006, cuando entregó a la hoy occisa APPO y a la Sección 22 de la CNTE, las instalaciones de la UBJO, siendo en ese tiempo el rector de la máxima casa de estudios oaxaqueña.
A Martínez Neru también lo recuerdan por su faceta de activista al lado de su medio hermano Felipe Martínez Soriano, este último, señalado de pertenecer a la "Liga Comunista 23 de Septiembre o la Unión del Pueblo", que en 1990 se vio involucrada en la muerte de dos guardias del periódico La Jornada, pero nueve años después obtuvo su libertad.