CIUDAD DE MÉXICO.- Con el objetivo de evitar el incremento injustificado en los precios de los productos de la canasta básica, el presidente Enrique Peña Nieto firmará este lunes con los representantes de la iniciativa privada, sindicatos y productores del campo el Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar.
Al filo de las 13 horas en el salón Adolfo López Mateos de Los Pinos, el mandatario signará un documento con Juan Pablo Castañón, presidente del CCE; Manuel Herrera Vega, presidente de la Concamin; Abel Domínguez Rivero, presidente del Congreso del Trabajo, y Manuel Humberto Cota Jiménez, secretario general de la Confederación Nacional Campesina, entre otros.
El gobierno federal se comprometería a impulsar las acciones que permitan mantener la estabilidad de los precios de la canasta básica, así como vigilar y sancionar cualquier abuso en los términos de ley.
Para ello, en coordinación con los gobiernos estatales, se impulsarán medidas para evitar actos de violencia, rapiña y vandalismo que afectan los derechos de terceros, y combatir la corrupción y aumen-tar la transparencia.
El Ejecutivo asumiría el compromiso de modernizar el transporte público y facilitar la movilidad urbana; mejorar las condiciones de crédito a través de la Banca de Desarrollo, y emprender las medidas que fomenten la inclusión laboral de los grupos vulnerables.
Contemplaría realizar una campaña de información y facilitación para la entrega de recursos del Sistema de Ahorro para el Retiro a adultos de más de 65 años que no lo hayan recibido y que tengan ese derecho; y reforzar acciones en favor de la libre competencia.
Los factores de la producción, se comprometen a seguir impulsando la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo.
El sector empresarial se comprometería a no incurrir en un incremento indiscriminado de precios de bienes y servicios, evitando repercusiones injustificadas o fenómenos de especulación, particularmente en la canasta básica.
Los sectores laboral y del campo se comprometerían a permanecerán atentos para detectar y denunciar casos de abuso o incumplimientos a este compromiso.
Adicionalmente, el gobierno federal reducirá 10% los sueldos de servidores públicos de mando superior de dependencias federales, sin que estas medidas afecten los programas sociales.