CIUDAD DE MÉXICO.- México ha fallado en el proceso de investigación para esclarecer el sonado caso de la desaparición y posible masacre de 43 estudiantes en el sur del país, dijo Amnistía Internacional, que agregó que sería un error creer que el tema está superado.
El presidente Enrique Peña Nieto, sugirió en diciembre, al referirse al caso que ha puesto bajo fuerte presión a su Gobierno, "ir hacia adelante y superar este momento de dolor", lo que le costó agrias críticas de sus adversarios.
"No podemos empezar una nueva historia hasta que este hecho no esté esclarecido, sería un error hacer eso porque estaríamos olvidando otra más de las tragedias y esperando la próxima", dijo Perseo Quiroz, director ejecutivo de AI.
En su opinión, la fiscalía ha "equivocado el camino" al omitir importantes testimonios de sobrevivientes que aseguran que durante la noche de septiembre de 2014 en que los estudiantes fueron atacados a balazos y entregados a narcotraficantes por policías corruptos, hubo participación del Ejército y otras corporaciones de seguridad.
"No estamos diciendo que hayan participado, estamos diciendo que si hay una responsabilidad tiene que haber un castigo, de lo contrario tiene que quedar claro que no estuvieron involucrados", agregó.
Tras casi cuatro meses del hecho, el Gobierno ha detenido a 97 probables responsables, pero siguen prófugos el líder de la organización delictiva Guerreros Unidos y el secretario de Seguridad Pública de Iguala (del sureño estado de Guerrero), señalados como principales autores del ataque.
Pese al constante despliegue de fuerzas de seguridad en Guerrero, que involucra a policía federal y militares, los asesinatos se duplicaron a más de 2 mil entre el 2008 y el 2013, año en que el estado registró la mayor tasa de homicidios del país con 63 por cada 100 mil habitantes, según datos oficiales.
Más de 100 mil personas han muerto en México desde finales del 2006, cuando el expresidente Felipe Calderón lanzó una campaña frontal contra los cárteles de la droga, que se fragmentaron a medida que caían sus líderes y elevaron la espiral de violencia a manos de sanguinarios sicarios.