CIUDAD DE MÉXICO.- El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) ha tenido que transferir recursos adicionales a las tiendas SuperISSSTE para cubrir los déficits administrativos que se generaron por falta de estrategias de gasto, informó el Instituto Nacional de Transparencia Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
La comisionada Arely Cano señaló que desde 2012 estos centros de abasto han enfrentado un escenario económico desfavorable. De acuerdo con las notas a los estados financieros publicadas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, hubo una diferencia entre los ingresos y los gastos en 2012 de más de 564 millones de pesos.
Refirió que la Auditoría Superior de la Federación, en la revisión de la Cuenta Pública 2014, encontró que cada tienda realizó pedidos de compra de manera individual, sin una estrategia definida, lo que provocó una mezcla inadecuada de productos, así como problemas de sobre inventario o desabasto.
También comprobó que SuperISSSTE no mantiene un control que asegure la eficacia y eficiencia del gasto financiero de sus ingresos, por lo cual los déficits producidos por fallas administrativas los ha cubierto el ISSSTE con transferencias de recursos, como los 500 millones de pesos referidos por un particular al solicitar información a través de la Plataforma Nacional de Transparencia.
Ante esa solicitud, el ISSSTE argumentó que la información de esa transferencia se encontraba como clasificada, ya que su difusión podría incrementar el costo de operación financiera realizada por los sujetos obligados del sector público federal, ya que las tiendas del ISSSTE tienen un desempeño con pérdidas operativas desde hace ya varios ejercicios.
Además, indicó que se afectarían las negociaciones con los proveedores en la compra de mercancía, pues al conocer las condiciones de pago, éstos podrían exigir la liquidación total del adeudo y suspender el suministro adicional lo cual ocasionaría un desabasto de las unidades de venta y con ello el incumplimiento del objeto social para las que fueron creadas las tiendas.
Sin embargo, el INAI ordenó al instituto hacer públicos los datos del proveedor, la fecha de pago, el adeudo total, la calidad y el saldo insoluto restante, ya que esa información no se relaciona con la estabilidad de la moneda o con los sistemas financieros como destacó el ISSSTE.
La comisionada Cano corroboró que el propio instituto ya había dado a conocer la forma en que se ejercieron los 500 millones de pesos, e incluso, el propio director del SuperISSSTE mencionó, en un comunicado de prensa, que se liquidó el cien por ciento de sus deudas con 212 proveedores, mientras que con 105 restantes estaba cubierto el 34 por ciento de los compromisos.