CIUDAD DE MÉXICO.- Los candidatos independientes enfrentan desventajas con respecto a los candidatos postulados por partidos políticos. En primer lugar, tienen que recopilar firmas de apoyo (lo cual es un requisito común en la mayoría de los países, aunque en el caso mexicano se argumenta que el número es muy elevado y que restringe el derecho a ser candidato sin partido).
Aunque en los casos de algunos cargos de elección el número de firmas es relativamente bajo, para los más importantes es significativo: varía entre 3 mil 600 y 10 mil firmas para diputaciones federales (depende del tamaño del distrito) hasta 103 mil en el caso de gobernador de Nuevo León.
En segundo lugar, mientras que los partidos pueden usar recursos públicos para organizar elecciones internas y seleccionar a sus candidatos, los aspirantes a candidaturas independientes no cuentan con esa posibilidad antes de las campañas. Sólo cuando reciban el registro oficial, la autoridad electoral les entregará recursos públicos.
Además, aunque los aspirantes a candidaturas independientes pueden acceder a financiamiento privado, los topes que les marca la ley son menores que para candidatos con partido –con excepción de Colima, el Distrito Federal y Nuevo León donde el tope es igual para ambos tipos de candidatos. Un ejemplo: para aspirantes a una candidatura independiente de diputado federal, el tope de gasto para recabar firmas es de 112 mil pesos; en contraste, el tope en las contiendas internas de los partidos es de 224 mil pesos.
La tercera desventaja es que los aspirantes independientes no cuentan con las mismas oportunidades para divulgar su plataforma política en medios electrónicos. Mientras los partidos y sus candidatos tienen acceso a la radio y la televisión desde el periodo de precampañas, los independientes sólo lo tienen después de que logran el registro, a partir del periodo de campañas.
Finalmente, el volumen de spots para los independientes es minúsculo frente a los candidatos de partido: todos los que obtengan su registro recibirán, en conjunto, 404 mil 278 spots durante todo el periodo de campaña, cifra que contrasta con los 14.4 millones que recibirán los partidos para promover a sus candidatos.
