Las dirigencias del PAN y PRD se dividieron en el Frente Ciudadano por México ante la posibilidad de dejar abierta la puerta al dirigente de Morena, Andrés Manuel López Obrador.
Mientras Alejandra Barrales aseveró que la puerta está abierta a todos los partidos, el dirigente panista, Ricardo Anaya dijo que bajo ninguna circunstancia ocurrirá eso.
"No veo que eso vaya a ocurrir bajo ninguna circunstancia porque hemos puesto como requisito indispensable el que se pongan los intereses del país por encima de cualquier interés personal y lo que en su caso priva (de Andrés Manuel) es más bien una obsesión personal por acceder al poder y por lo tanto como él mismo lo ha dejado claro desde un principio, su posición autoritaria y personalista no tendría cabida en un ejercicio plural, democrático, propositivo e incluyente como el que nosotros estamos construyendo", dijo el dirigente panista.
Anaya Cortés aclaró que en el Frente "no aspiramos a una simple alianza entre tres partidos, queremos lograr algo mucho más grande, mucho más amplio con organizaciones de la sociedad civil, con intelectuales, con académicos".
Todo esto, agregó, es en tres etapas: primero, la construcción de proyecto de país, poderle decir a México con enorme claridad que es lo que vamos a hacer cuando lleguemos al gobierno y en qué consiste la transformación profunda que estamos planteando.
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