CIUDAD DE MÉXICO.- Legisladores federales y locales del PRD de Oaxaca revelaron que el gobernador Gabino Cué, no sólo debe explicar sus acuerdos con la CNTE –y el origen y el destino de la deuda del estado–, sino pagar las "facturas" que "dividieron y colapsaron al PRD en el estado".
Aunque ganó la elección para diputado federal –su candidato "impuesto"–, el expriista José Antonio Estefan Garfias, los legisladores aseguraron que Cué pagó 10 millones de pesos a la dirigencia nacional del PRD por esa candidatura y dejó fuera al líder perredista en el Congreso local, Félix Serrano.
Los legisladores mostraron testimonios, mensajes y textos de llamadas telefónicas de los operadores de Cué y del presidente nacional del PRD, Carlos Navarrete.
Cuentan que a principios de marzo, la diputada local Aleida Serrano, recibió una llamada de Jorge Castillo Díaz, operador de Cué, y al confundirla con la diputada federal Aleida Alavez Ruiz, le dijo: "¿Sabes quién habla? Habla Jorge Castillo y necesito que me ayudes. El gobernador necesita que le ayudes. Yo luego veo la forma de cumplirle a IDN (Izquierda Democrática Nacional). Ya tengo cinco firmas, tú puedes influir sobre la diputada Iraís González Melo y chingamos a Félix".
La diputada contestó: "Te agradezco que me digas esto, pero te equivocaste. Soy Aleida Serrano Rosado y no Aleida Alavez Ruiz. Y discúlpame, pero no te puedo ayudar a chingar a mi tío".
Tras lo anterior, Aleida Alavez pidió no utilizar su nombre para ejercer acciones de corrupción: "Le pido que no utilice mi nombre para cosas que no tienen que ver con mi actuar político, con mis posturas y con las formas".
Indicaron que el 19 de marzo, Carlos Navarrete envió un mensaje al actual diputado federal Rosendo Serrano, para asegurarle que su hermano Félix sería el candidato del PRD. Navarrete escribió: "¡Qué tal Chendo, mañana aprobamos la candidatura de Félix en el CEN, prepárense para ganar el Distrito! Saludos".
Sin embargo, cuentan, el 20 de marzo, Navarrete recibió una llamada de Cué, quien le pidió que oficializara la candidatura del expriista José Garfias, lo que fue suficiente para que Navarrete olvidara a los hermanos Serrano Toledo.