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Nueva York.- La venta de pistolas y municiones sigue en aumento en Estados Unidos conforme se acerca la fecha, la próxima semana, en la que el vicepresidente Joseph R. Biden presentará su propuesta para frenar la violencia con armas.
Miles de aficionados a las armas se han apresurado en las últimas semanas a ampliar sus arsenales antes de que se imponga alguna nueva restricción a su venta.
Comerciantes y compradores de armamento dijeron al periódico The New York Times que el rápido crecimiento en la venta de armas comenzó a subir de manera significativa después que el presidente Barack Obama obtuviera su reelección.
Sin embargo, las ventas se dispararon tras el tiroteo ocurrido el 14 de diciembre pasado en una escuela en Newtown, Connecticut, que dejó a 27 personas muertas, entre ellos 20 niños.
El tiroteo en Connecticut puso de nuevo en la mesa el debate sobre el control de la venta de armas y condujo a muchos a pedir leyes más estrictas para su comercialización.
En diciembre pasado se estableció un nuevo récord en el número de personas a quienes se revisan sus antecedentes penales para determinar si puede poseer legalmente un arma, como parte del proceso que se efectúa antes de la compra.
Ese proceso es un gran indicio del fuerte incremento en la venta de armamento, según un análisis de datos federales de la Fundación Nacional Deportiva de Tiro.
La fundación informó que 2.2 millones de revisiones de antecedentes se realizaron el mes pasado, un aumento del 58.6% o respecto al mismo periodo de 2011.
Algunos comerciantes de armas dijeron en entrevistas que nunca habían visto tal demanda.
"Si yo tuviera mil AR-15 las podría vender en una semana", dijo al New York Times, Jack Smith, un vendedor de armas independiente en Des Moines, Iowa, al referirse al popular estilo de rifle semiautomático que atrajo la atención nacional después de que Adan Lanza lo utilizara en la masacre de Newtown.
Smith indicó que muchas personas fueron a abastecerse de cargadores de alta capacidad en previsión de que pudieran ser prohibidos.
Hace 2 semanas, agregó, un cargador de rifle de 30 tiros, costaba 12 dólares, pero ahora se obtiene en 60. Muchas tiendas en el internet han agotado sus existencias de cargadores de 20 y 30 compartimientos.
El vicepresidente Biden explicó que el grupo de trabajo que coordina se prepara para emitir sus recomendaciones el próximo martes al mandatario Obama sobre la prevención de la violencia armada.
La Campaña Brady para Prevenir la Violencia Armada, uno de los principales grupos de control de armas de la nación, dijo que su prioridad era cerrar los vacíos legales que permiten actualmente que el 40% de las ventas de armas se hagan sin revisión de antecedentes.
Algunos grupos que apoyan el control de armas instaron a la Casa Blanca a no centrarse demasiado en una prohibición de armas de asalto, que según ellos podría ser difícil de ser aprobada por el Congreso.
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