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Turismo en Sri Lanka cae 80% tras atentados de domingo de Pascua

La ocupación hotelera disminuyó radicalmente y las playas lucen desiertas en un país en el que el turismo produce 4.9 por ciento de PIB y 2 millones de personas viven de dicha actividad.

Sri Lanka era el principal destino turístico de la guía de viajes Lonely Planet para 2019, pero luego de los ataques del Domingo de Pascua, los turistas han evitado viajar a la nación.

De acuerdo con cifras del gobierno, ha habido una caída del 80 por ciento en las llegadas de turistas desde los ataques. La ocupación hotelera en la isla se ha hundido entre 85 y 90 por ciento. Las playas, restaurantes y tiendas están vacíos.

Mientras sorbía agua fresca de coco y tomaba el sol en la playa desierta de Hikkaduwa, Alexi Konchayenko, entrenador deportivo de Ucrania, comentaba sobre la escasez de turistas.

Los atentados con bombas pueden ocurrir "donde sea y cuando sea", comentó y agregó que no tenía miedo. "Sri Lanka es un país increíble. Es mi primera visita y le diré a mis amigos que también vengan".

Sin embargo, es una voz solitaria... tan solitaria como su presencia en esa playa.

Los ataques suicidas coordinados del 21 de abril no solo destruyeron vidas, sino que también afectaron los medios de vida de muchos residentes que dependen del turismo.

El turismo representa 4.9 por ciento del PIB de Sri Lanka. El año pasado, 2.3 millones de turistas visitaron la isla, generando 4 mil 400 millones de dólares en ganancias, un aumento del casi 12 por ciento respecto a 2017.

Alrededor de medio millón de esrilanqueses dependen directamente del turismo, mientras que 2 millones dependen indirectamente de él.

Más de 250 personas, incluidos 45 extranjeros principalmente de China, India, Estados Unidos y Gran Bretaña, fallecieron en los ataques perpetrados por ISIS.

Los turistas generalmente viajan a Hikkaduwa, en el suroeste del país, debido a que las olas son perfectas para surfear y las aguas cristalinas están hechas para el esnórquel. Hoy en día, de los 27 hoteles que hay en la región, un puñado están abiertos. La mayoría, junto con los restaurantes que bordean el tramo de 6 kilómetros de la playa con palmeras, están cerrados.

Algunos funcionarios turísticos dijeron que la industria se ha visto más afectada tras los atentados que durante la guerra civil de 26 años entre la organización Tigres de Liberación del Eelam Tamil y el gobierno, que terminó hace una década. Por lo menos en ese entonces la violencia estaba contenida en el norte de Sri Lanka, informaron. Ahora, ninguna parte de la isla se ha salvado de los ataques.

El presidente de la Asociación Hotelera de Sri Lanka, Sanath Ukwatta, dijo que los hoteles han ofrecido descuentos del 30 por ciento al 50 por ciento para atraer a los residentes locales.

Una estrategia de ese tipo no resuelve el problema, comentó, pero "ayudará a que por lo menos los hoteles sigan operando".

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