Trump indulta a Michael Flynn, exasesor de seguridad nacional vinculado a la trama rusa

El presidente Donald Trump dijo que ha indultado a Michael Flynn, su primer asesor de seguridad nacional, quien se declaró culpable de mentir a agentes del FBI sobre su conversación con el embajador ruso en Estados Unidos.

Trump hizo el anuncio el miércoles en Twitter.

El indulto pone fin a un caso criminal largo y duramente reñido que se convirtió en una causa célebre para Trump y sus aliados conservadores, quienes describieron el procesamiento de Flynn como evidencia de una amplia conspiración contra el presidente.

Pero los demócratas rápidamente denunciaron la medida. El representante Adam Schiff de California, presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara, dijo que "no hay duda de que un presidente tiene un amplio poder para otorgar indultos, pero cuando se utilizan para protegerse a sí mismo, a su familia y a sus asociados de una investigación criminal, es una corrupción de esta medida".

"No es de extrañar que Trump salga justo cuando entró, torcido hasta el final".

La narrativa se ha desviado de las declaraciones de culpabilidad iniciales de Flynn durante la investigación de la interferencia rusa en las elecciones de 2016, a la sorpresiva decisión del fiscal general William Barr en mayo de retirar los cargos y la negativa del juez federal de distrito Emmet Sullivan a aprobar la solicitud.

En septiembre, el abogado de Flynn, Sidney Powell, le dijo a Sullivan que ella le había pedido personalmente a Trump que no perdonara a su cliente mientras luchaban para que se desestimara el caso.

Powell, quien este mes participó en la campaña legal de Trump para desafiar la victoria del presidente electo Joe Biden, testificó en una audiencia mientras Sullivan sopesaba si la solicitud del Departamento de Justicia de abandonar el caso era una decisión políticamente corrupta.

Trump, quien dio la bienvenida a exgenerales en su gabinete, recompensó a Flynn con el puesto de asesor de seguridad nacional. Renunció apenas unas semanas después de la nueva administración en medio de evidencia de que había engañado a los funcionarios, incluido el vicepresidente Mike Pence, sobre el contenido de sus llamadas con el entonces embajador ruso, Sergey Kislyak, durante la transición.

La caída de Flynn ocurrió cuando la investigación sobre Rusia, para consternación de la Casa Blanca, cobró fuerza, lo que finalmente llevó al nombramiento del fiscal especial Robert Mueller, cuya investigación ensombreció gran parte del tiempo de Trump en el cargo.

Después de declararse culpable y aceptar cooperar con el gobierno, Flynn intentó cambiar su declaración, ya que los fiscales dijeron que no estaba siendo sincero con ellos.

Trump, que había pedido la renuncia de Flynn, elogió a su exasistente y denunció el caso como un asalto político con él como el objetivo final.