MINSK.- Los líderes de Ucrania, Rusia, Alemania y Francia anunciaron después de 17 horas ininterrumpidas de negociación en Minsk un acuerdo de 13 puntos para el cese al fuego en el oriente del primer país entre el gobierno y los rebeldes, que incluirá el retiro de armas pesadas del frente y autonomía para los prorrusos. El FMI aseguró por su lado que entregará ayuda a Kiev por 40 mil millones de dólares en los próximos cuatro años para mantener su economía a flote.
El convenio entre los "cuatro de Normandía", que entrará en vigor el domingo, fue resaltado por el presidente ruso, Vladimir Putin, quien indicó en el Palacio de la Independencia de esta capital que se logró "un gran acuerdo" y explicó que el rechazo de Kiev a dialogar directamente con el mando de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk fue una de las causas por las que las conversaciones se prolongaron. "Pueden no ser reconocidos, pero tenemos que tratar con la vida real y si todos quieren un acuerdo y relaciones sostenibles, los contactos directos son necesarios", afirmó.
El mandatario ucraniano, Petro Poroshenko, sostuvo que "el tema principal es que de sábado a domingo debe declararse ––sin ninguna condición–– un cese al fuego general". Alexander Zajarchenko, jefe de los prorrusos de Donetsk, advirtió que "si los términos son rotos no habrá nuevos encuentros o memorándums", tras agregar que aceptó suscribir el pacto, con Igor Plotnitsky, su homólogo de Lugansk, por "las garantías de los presidentes de Rusia y Francia, así como de la canciller federal de Alemania".
A su vez, la dirigente germana, Angela Merkel, expresó que "ahora tenemos un rayo de esperanza", si bien "todavía hay grandes obstáculos adelante. No tenemos ilusiones".
