Dos fuertes sismos sacudieron este domingo a Ecuador en la zona que hace casi dos meses fue devastada por un terremoto, y aunque los movimientos se sintieron hasta en Quito y Guayaquil, no se reportaban preliminarmente daños ni víctimas.
El sismo más fuerte tuvo una magnitud de 6.4 con epicentro cerca de Muisne, en la costa del país y a unos 400 kilómetros de la capital Quito, según el Servicio Geológico de Estados Unidos. A pesar de que fue a una profundidad de sólo 35 kilómetros, las autoridades descartaron un alerta de tsunami.
Muchos ecuatorianos salieron a las calles cerca de la zona del epicentro, en la provincia de Esmeraldas, donde se cortó el servicio eléctrico. En la capital también mucha gente evacuó sus edificios después del primer sismo de magnitud 5.9.
Dos réplicas fuertes con epicentro en Muisne. Todos a guardar la calma.
— Rafael Correa (@MashiRafael) 11 de julio de 2016
Un abrazo a toda Esmeraldas.
"Dos réplicas fuertes con epicentro en Muisne. Todos a guardar la calma. Un abrazo a toda Esmeraldas", dijo el presidente Rafael Correa en su cuenta de Twitter.
El ministro de Seguridad, César Navas, dijo por la televisión pública que hasta ese momento no había reportes de víctimas.
A mediados de abril, un sismo de magnitud 7.8 seguido por decenas de réplicas dejó en la provincia de Esmeraldas al menos 663 personas muertas y daños en edificaciones a lo largo de la costa del Pacífico por 3 mil 300 millones de dólares que tendrán un impacto en el PIB de 0,7 puntos porcentuales este año.