BARCELONA. Los restos de 32 pasajeros españoles que murieron al estrellarse un avión de Germanwings fueron trasladados en avión a Barcelona para ser entregados a sus familiares, 12 semanas después que el copiloto estrellara intencionalmente la aeronave en los Alpes franceses el 24 de marzo, causando la muerte de las 150 personas a bordo.
Lufthansa, propietaria de Germanwings, dispuso de un salón en el edificio del aeropuerto donde los familiares recibieron los restos de sus seres queridos en un "ambiente digno", dijo el portavoz de la aerolínea, Martin Riecken. Había psicólogos en el sitio para atender a las personas que lo solicitaran.
Las familias enviaron carrozas para recoger los restos y llevarlos a los sitios de sus funerales, dijo Riecken.
Los restos viajaron en un avión de Lufthansa desde Marsella, Francia.
Cuarenta y siete víctimas en el vuelo Barcelona-Düsseldorf eran españoles y cuatro eran ciudadanos de doble nacionalidad con pasaporte español. Un total de 72 alemanes murieron, así como ciudadanos de más de una decena de otros países.
El traslado a España ocurrió una semana después de que los restos de 44 víctimas alemanas fueran enviados a ese país. Entre las víctimas había 16 estudiantes de preparatoria que habían participado en un programa de intercambio en España.
Las autoridades creen que el copiloto del avión, Andreas Lubitz, estrelló el avión deliberadamente contra una montaña.
Lufthansa dice que todos los restos serán enviados a sus familiares para finales de mes. La causa del desastre es investigada por autoridades francesas.