PARÍS.-Las principales metrópolis mundiales intentarán enfrentar la creciente amenaza terrorista del Estado Islámico (EI) con un gran despliegue de fuerzas de seguridad y estrictos controles para garantizar la seguridad en las celebraciones de Año Nuevo.
Aunque el Parlamento Europeo descartó "amenazas reales" de ataques en la zona euro, el gobierno de Bruselas decidió anular el lanzamiento de fuegos artificiales y las festividades previstas para la media noche de hoy en el centro de la capital, por razones de seguridad.
"Lamentablemente, los fuegos artificiales, así como todo lo que estaba previsto para mañana (jueves) de noche, tendrá que ser cancelado, teniendo en cuenta el análisis realizado por el centro de crisis", declaró el alcalde Yuan Mayeur. El año pasado unas cien mil personas asistieron a las celebraciones de Nochevieja en la plaza de Brouckère, en el centro de Bruselas.
MÁXIMA SEGURIDAD
En Francia, en estado de excepción desde los atentados ocurridos en París el día 13 de noviembre, unos seis mil policías y soldados velarán por la seguridad de la noche de fin de año. El espectáculo de fuegos artificiales también fue cancelado, mientras las áreas cercanas a los Campos Elíseos y la Torre Eiffel permanecerán cerrados y controlados.
Unos tres mil policías, entre tanto, velaran por la seguridad en las calles de Londres y para disfrutar del espectáculo pirotécnico en el London Eye se necesitará boleto de entrada.
En Berlín, el recinto público pensado para celebrar la llegada del Año Nuevo fue puesto bajo enormes medidas de seguridad. Se espera que cientos de miles de personas celebren la noche en los dos kilómetros que separan la puerta de Brandeburgo de la Columna de la Victoria. Allí habrá 900 efectivos, 150 más que el año pasado.
La entrada con mochilas grandes estará prohibida por primera vez, confirmaron los organizadores en respuesta a los ataques de París, reconoció una portavoz. Además, todas las mochilas serán controladas.
El conocido parque colindante Tiergarten permanecerá vallado por primera vez. Antes de que comience la fiesta, la policía rastreará el parque con perros para localizar explosivos y después velará para que nadie se suba a la valla.
En Italia habrá más efectivos que de costumbre para garantizar la seguridad de la noche y todos los que acudan a la gran ceremonia de fin de año, el concierto en el Circo Massimo, evento al que todos los años acuden miles de personas, serán registradas con detectores de metales.
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Por su parte, la entrada a la madrileña Puerta del Sol, donde todos los años miles de personas saludan al nuevo año, estará regulada por primera vez.
La Plaza Roja de Moscú permanecerá cerrada durante los tradicionales festejos y sólo se podrá acceder a ella con una entrada especial.
Nueva York, por su parte, también ha preparado un plan de seguridad "más amplio que nunca" con unos seis mil policías para los festejos de la llegada del Año Nuevo en Times Square, que suelen congregar hasta un millón de personas.
En medio de la preocupación por las posibles amenazas terroristas contra la ciudad que sufrió los ataques del 11 de septiembre del 2001, el alcalde Bill De Blasio aseguró que hoy jueves 31 de diciembre habrá en las calles un "enorme número de policías", incluyendo más de 500 hombres de la nueva unidad antiterrorista, "Comando de Respuesta Crítica".
En Turquía l policía detuvo ayer a dos presuntos terroristas que planeaban atentar en diferentes lugares de Ankara durante la celebración de la Nochevieja.
Los sospechosos, identificados como M.C y A.Y, de origen turco, pretendían atacar en dos puntos distintos de la céntrica plaza de Kizilay, delante de un gran centro comercial y en una calle llena de bares, según informó la policía.
Turquía se encuentra en estado de alerta desde el 10 de octubre pasado cuando un doble atentado suicida mató a 103 personas en la estación central de Ankara, poco antes de una manifestación pro kurda.