La policía belga terminó poco antes de la medianoche del miércoles la búsqueda de explosivos en el barrio de Schaerbeek, y permitió el retorno de los residentes de la zona a sus domicilios, informó la cadena belga RTBF.
En el barrio se encontraron material explosivo y emblemas del grupo yihadista ISIS, después de que se registraran dos estallidos en el aeropuerto de Zaventem en Bruselas, y uno más en la estación del metro Maelbeek, con un saldo de al menos 30 muertos y unos 200 heridos.
La policía científica indicó que sus laboratorios efectúan análisis de muestras de los materiales decomisados en presencia de especialistas del Servicio de Retiro y Destrucción de Explosivos.
Helicópteros de la policía también sobrevolaron el área mientras se realizaba la búsqueda y retiro de los explosivos.
De acuerdo con las investigaciones, tres presuntos yihadistas hicieron detonar dos artefactos explosivos en la terminal aérea este martes, donde murieron 10 personas y un centenar resultaron heridas, así como en la estación del metro, donde hubo 20 muertos y 100 heridos más. Dos de los autores de los atentados habrían muerto, y uno más es buscado por las autoridades.
Para esta jornada, la red del metro de la empresa STIB operará de manera parcial, a fin de "garantizar la máxima seguridad en la red de transporte público el miércoles por la mañana".
La estación de Maelbeek y otras aledañas permanecerán cerradas, y el servicio de transporte será brindado por autobuses.
La reapertura de las estaciones del metro de la zona dependerán de las decisiones que adopte el gobierno, el cual dispuso una fuerte vigilancia militar y policial para garantizar la seguridad de los usuarios, indicaron los responsables del servicio.