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May busca aplazar Brexit tras freno a una tercera votación a su acuerdo

Una editora de la BBC, citando a fuentes, dijo que el plazo final que pedirá sea el 30 de junio, con una cláusula que estipule un retraso de hasta 2 años.

LONDRES.- La primera ministra británica, Theresa May, pedirá a la Unión Europea que aplace el Brexit al menos tres meses, después de que sus planes para votar de nuevo un acuerdo de divorcio que ya fue rechazado dos veces fueron frustrados por una inesperada intervención del presidente del Parlamento.

Casi tres años después de que Reino Unido votó en favor de abandonar la UE, el adiós sigue siendo incierto. Entre los posibles desenlaces se barajan un retraso largo, una salida con el acuerdo negociado por May con Bruselas, un abandono sin pacto o, incluso, otro referendo.

A 10 días de que se cumpla el plazo de salida del 29 de marzo, fijado dos años atrás por May al presentar la solicitud formal en virtud del "Artículo 50", y dos días antes de una cumbre crucial de la UE, la primera ministra estaba escribiendo este martes al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, para pedirle un aplazamiento, afirmó su portavoz.

No quedó claro de inmediato qué postergación buscará. Antes había advertido al Parlamento que si no ratificaba su acuerdo pediría aplazar el Brexit más allá del 30 de junio, un paso que los defensores del adiós temen que pueda poner peligro el proceso entero de divorcio.

Otros estados miembro de la UE discutían dos opciones principales: una postergación de dos a tres meses, si May les convence de que puede lograr un acuerdo en casa, o más larga si la primera ministra acepta que se necesita un rediseño radical.

La editora política de la BBC, Laura Kuenssberg, dijo que May pedirá una extensión hasta el 30 de junio -lo que le podría dar otra oportunidad para que el Parlamento apruebe su plan- con una opción de dilatar el proceso hasta dos años.

Brexit en crisis

En una decisión que aumentó la sensación de crisis en Londres, el presidente del Parlamento, John Bercow, dictaminó el lunes que el acuerdo de Brexit debe ser sustancialmente diferente para ser votado de nuevo.

El secretario del Brexit, Steve Barclay, dijo que es más improbable que se vote esta semana, pero indicó que los ministros estudian otras opciones y el gobierno aún planea que se realice una tercera votación. "Es un momento de crisis para nuestro país".

La líder más poderosa de la UE, la canciller alemana Angela Merkel, afirmó: "Pelearé hasta el último minuto del tiempo hasta el 29 de marzo por una salida ordenada. No hemos tenido mucho tiempo para eso".

Si se va de esta manera, Reino Unido dejaría al instante un mercado único y una unión aduanera de 500 millones de personas, regresando a las reglas de la Organización Mundial de Comercio, lo que podría implicar muchas tarifas de importación y exportación.

Asimismo, se enfrentaría a la perspectiva de una disrupción en su mercado manufacturero y financiero, una dura contracción económica y retrasos en las fronteras.

No obstante, Francia fue más directa, asegurando que un adiós no pactado es posible. "¿Aprobar una extensión para qué? El tiempo no es una solución, es un método", dijo la ministra de Asuntos Europeos, Nathalie Loiseau. "Si hay un objetivo y una estrategia, debe venir desde Londres".

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