Mundo

España le dice adiós al bipartidismo con nueva generación de políticos

El próximo domingo habrá votaciones en España, y de acuerdo con las encuestas, los votantes están optando por una nueva generación de políticos, en busca de un cambio, luego de que la economía va a un paso lento.

Los españoles votarán el próximo domingo con una nueva generación de políticos que demandan poder y la más vieja preocupándose por una recuperación económica que ha sido muy lenta para muchas personas.

El país está arrancando de nuevo luego de una mala racha de seis años; sin embargo, las encuestas muestran que el primer ministro, Mariano Rajoy, está perdiendo alrededor de un tercio del apoyo que le dio una mayoría récord hace cuatro años. Los votantes se preparan para protestar por una ola de presunta corrupción, un salto de casi 700 mil millones de euros (760 mil millones de dólares) en deuda pública después de rescatar a los bancos y por el desempleo que sigue estando por encima del 20 por ciento. Pero, sobre todo, sólo hay una creciente sensación de que España necesita un nuevo liderazgo, lo que sea que eso signifique.

"Hay mucha gente que quiere un cambio", dijo Sebastián Balfour, profesor emérito de estudios de Español en la London School of Economics. "Pero no es del todo claro qué tipo de cambios quieren".

Es un tema de descontento que ha jugado desde Atenas hasta Ottawa este año, en tanto los votantes se rebelan contra la vieja guardia cambiando a nuevas caras, entre el ministro griego Alexis Tsipras o el primer ministro canadiense, Justin Trudeau y su optimismo juvenil.

DESPUÉS DE FRANCO

Rajoy, de 60 años, es el último de una generación de líderes que creció bajo la dictadura del general Francisco Franco y cortó sus dientes políticos durante los primeros años de la democracia.

De los rivales de Rajoy, se encuentra el líder de Podemos, Pablo Iglesias, de 37 años, nació semanas antes de que la constitución democrática entrará en vigor. El abogado catalán, Albert Rivera, de Ciudadanos es un año más joven, mientras que Pedro Sánchez de 43 años de edad, encabeza a los socialistas.

El titular del Partido Popular y la oposición socialista han gobernado España durante los últimos 33 años y uno de ellos seguirá, probablemente, liderando en el próximo gobierno en Madrid. La clave es con quién. Encuestas finales antes del apagón preelectoral el lunes pasado, mostraron los cuatro principales partidos van ganando entre el 17 y 28 por ciento.

El Partido Popular y Rajoy "han hecho un buen trabajo en lo que respecta a la economía, pero han carecido de la empatía - han estado muy asustados al hacer frente al pueblo", dijo Javier Delgado, abogado de 51 años. 

Las elecciones del domingo van a significar el fin del sistema bipartidista. Es tan simple como eso

VIEJO MODELO

Bajo el viejo modelo encarnado por el primer ministro y su partido, los altos funcionarios y los ejecutivos de las empresas de los antiguos monopolios estatales y de la construcción forjada en una corte con información privilegiada gobiernan al país.

Más abajo en la pirámide, los trabajadores más viejos disfrutan de contratos indefinidos y, junto con los jubilados, dominan la propiedad. Durante la campaña antes de la votación el 20 de diciembre, Rajoy asaltó el fondo de reserva de seguridad social de 7.8 millones de euros para pagar el bono anual de Navidad de los pensionados que conforman su administración. También se comprometió a eliminar los impuestos sobre la renta para los que siguen trabajando aún después de su jubilación.

"Este es un país que todavía está a cargo de un pequeño número de grandes empresas para su propio beneficio", dijo Ken Dubin, un politólogo de la Lord Ashcroft International Business School en Cambridge, Inglaterra. "Hay mucha presión para realmente repasar un montón de cosas".

Fuera de ese círculo de protegidos, 4.9 millones de españoles permanecen en paro luego de más de dos años del inicio de la recuperación y otros 2.2 millones de trabajadores viven en la pobreza, en tanto la reforma laboral de Rajoy se canaliza en dar a los jóvenes puestos de trabajo temporales, mal pagados, que forman parte de su estrategia para reducir los costos y hacer que la economía sea más competitiva.

El talismán para los forasteros descontentos es Podemos, un partido antiausteridad que reúne las teorías de los científicos políticos, y su líder Iglesias a la energía de los jóvenes manifestantes que acamparon en el centro de Madrid en 2011. Podemos quiere gastar un extra de 25 mil millones de euros al año para crear empleos y elevar el salario mínimo.

DESPUÉS DE LA VOTACIÓN

El partido promercado Ciudadanos, como Podemos, está luchando contra una elección nacional por primera vez. Sus jóvenes profesionales se ven como expertos, sin embargo, Rivera, un exabogado corporativo, argumenta que el país necesita una transformación mayor para romper las barreras del privilegio. Quiere aumentar la competencia, reducir la burocracia, eliminar los niveles de gobierno regional y asegurarse de que los controles y equilibrios sobre funcionarios funcionan correctamente.

Mientras Rajoy llama a los votantes a no poner la economía en riesgo al optar por ingenuos políticos, Sánchez y sus socialistas están tratando de dividir la diferencia entre un envejecimiento, la base de la clase obrera y los progresistas urbanos en busca de la reforma.

De esa mezcla, los líderes de los partidos, posiblemente con el consejo del rey Felipe, tendrán que negociar una alianza de gobierno para llevar al país hacia adelante.

"Tenemos que dar un gran salto adelante para hacer a la economía más innovadora, más empresarial", dijo Federico Steinberg, economista del instituto de investigación Elcano en Madrid. "El modelo de crecimiento que nos trajo hasta aquí ya no es suficiente".

También lee: