Mundo

Declaran nuevo estado de emergencia en Tokio por récord de casos de COVID-19

La declaratoria afecta a la capital y a las prefecturas circundantes, señaló Yoshihide Suga, primer ministro de Japón, quien advirtió que la economía se verá afectada.

El primer ministro japonés, Yoshihide Suga, declaró este jueves el estado de emergencia para Tokio y las áreas adyacentes, en un esfuerzo por tratar de detener las infecciones por COVID-19 que alcanzaron un récord diario en la capital.

La declaración cubre la capital y las prefecturas circundantes de Kanagawa, Saitama y Chiba, apuntó Suga, y agregó que tendrá un impacto en la economía.

El estado de emergencia comenzará desde el próximo viernes hasta el 7 de febrero y se produce después de que la capital japonesa informó de 2 mil 447 nuevos casos confirmados del coronavirus, un récord.

La declaratoria no implica el tipo de confinamientos observados en algunas partes de Europa, y el gobierno está buscando implementar medidas mucho menos estrictas que las del año pasado, que desencadenó la peor contracción económica registrada.

"La actual ola de infecciones es peor de lo que habíamos imaginado, pero creemos que podemos superarla", subrayó Suga en una conferencia de prensa. "Para lograr eso tenemos que pedirles que acepten restricciones en sus vidas".

Se pedirá a los residentes que eviten salir después de las 20:00 horas y los bares y restaurantes deberán cerrar en ese momento del día. Las autoridades no pueden exigir el cumplimiento por ahora, aunque Suga busca enmendar la ley para agregar sanciones a las empresas que no cumplan con las medidas gubernamentales y formalizar incentivos para aquellas que lo hagan.

El gobierno también promoverá el regreso del teletrabajo, con el objetivo de reducir el número de viajeros en la región en 70 por ciento.

Te puede interesar: Tic tac: Olimpiadas de Tokio están a 200 días y organizadores se enfrentan a gigantesca tarea

Suga anunció subsidios de hasta 1.8 millones de yenes (17 mil 400 dólares) al mes para los restaurantes que sí cumplan con el horario reducido de servicio.

El aumento en los contagios de COVID-19 ha sido un duro golpe para Suga, que había tratado de restaurar el crecimiento económico a pesar de la pandemia, incluso ofreciendo incentivos a viajes nacionales para impulsar la industria del turismo. Su apoyo público se ha desplomado, y las encuestas muestran que la mayoría de los votantes están a favor de medidas pandémicas más duras.

Incluso antes de que Suga insinuara por primera vez que declararía un estado de emergencia, se pronosticaba que la recuperación económica se desaceleraría en los primeros tres meses de 2021, con las empresas reduciendo la inversión y los hogares optando por ahorrar más.

Es probable que las restricciones a las actividades obstaculicen la eficacia del paquete de estímulo económico que Suga preparó el mes pasado, que será financiado con un presupuesto adicional. El paquete ya no es adecuado en el entorno actual, resaltó Takahide Kiuchi, economista del Nomura Research Institute, en una nota de investigación.

"El gobierno debería cambiar el curso de la política económica a fin de fortalecer el apoyo a empresas e individuos", subrayó.

Será el segundo estado de emergencia en Japón después de una declaración que comenzó en abril, pero no se espera que cause tanto daño como el primero, cuando el virus y una cuarentena más amplia frenaron la economía y la enviaron a su peor recesión. .

La exclusiva campaña de viajes promovida por Suga, que ya había sido suspendida hasta el 11 de enero, no se reactivará mientras esté vigente el estado de emergencia. Sin embargo, no se pedirá a las escuelas que cierren y los exámenes de ingreso a la universidad se realizarán según lo programado.

Japón ha tenido, con mucho, la tasa más baja de infección de todas las naciones del G-7, registrando menos casos en el último año de lo que Estados Unidos ha visto en los últimos días.

También lee: