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Ahora Trump justifica el muro con México por caso LeBarón

El presidente de EU hizo referencia al ataque contra familiares LeBarón y afirmó que la gente ya está empezando a coincidir con él sobre la construcción del muro.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, argumentó este miércoles que el ataque a integrantes de la familia LeBarón, que dejó nueve muertos en los límites de Chihuahua y Sonora, demuestra que él tiene razón sobre construir el muro y tener una frontera con México muy fuerte.

"Cuando ves lo que está pasando del otro lado de la frontera, la gente está empezando a decir: 'quizá él tiene razón acerca del muro, y quizá él tiene razón sobre construir un fuerte muro'", afirmó durante un discurso sobre temas judiciales en la Casa Blanca.

"El otro bando (los demócratas) quiere fronteras abiertas que traen una gran criminalidad, y muchos me han dicho eso en los últimos días, que han empezado a entender el tema de la frontera", añadió el mandatario.

Trump señaló el martes que es tiempo de que México se enfrente a los cárteles de la droga que existen en el territorio, luego del asesinato de familiares del activista Julián LeBarón.

"Este es el momento para que México, con la ayuda de Estados Unidos, haga la GUERRA contra los cárteles de la droga y los borre de la faz de la tierra. ¡Simplemente esperamos una llamada de su nuevo presidente!", aseguró en su cuenta de Twitter.

La postura del presidente norteamericano ante los hechos fue de condena a estos actos de violencia sin sentido, de acuerdo con el vocero de la Casa Blanca, Hogan Gidley.

El mandatario estadounidense también mencionó que, en caso de que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador solicite ayuda para combatir al narcotráfico, está dispuesto a brindarla.

López Obrador agradeció posteriomente a su homólogo estadounidense por ofrecer su ayuda para luchar contra el narcotráfico en México, pero señaló que eso corresponde a las autoridades del país.

Un grupo armado emboscó y ejecutó en Bavispe, Sonora, a tres mujeres lactantes y seis niños –entre ellos dos bebés– integrantes de la familia LeBarón. No hicieron caso a los gritos de terror ni a la súplica de las víctimas que pedían parar el ataque; por el contrario, hicieron más de 200 tiros con rifles de asalto AK47 y AR15.

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