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LA PAZ.- Bolivia comenzó un lento conteo de votos para conocer al ganador de los comicios presidenciales tras una jornada electoral tranquila y con alta participación, que contrastó con la tensión que antecedió a la crucial justa electoral.
El presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Salvador Romero, anunció que no utilizará el sistema de resultados preliminares para el conteo de votos para no generar "incertidumbre" en la población y sólo se trabajará con datos oficiales, por lo que los cómputos oficiales podrían demorar hasta cinco días.
Informó que "por responsabilidad con el país" se decidió no utilizar el sistema de Difusión de Resultados Preliminares (Direpre), porque lo que pidió calma a los bolivianos, que atraviesan por un "clima de alta polarización".
"El resultado oficial y final nos va a tomar algunas horas adicionales y es importante que la ciudadanía tenga paciencia porque el resultado va a ser confiable, (aunque) un poco más lento", afirmó Romero.
En un mensaje al país tras el cierre de los centros de votación, la presidenta interina, Jeanine Áñez, agradeció a los bolivianos "por la jornada tranquila" y pidió "paciencia para esperar los resultados sin generar violencia".
La decisión del principal ente electoral del país a horas previas de la votación de descartar el sistema rápido de difusión de los resultados, generó dudas principalmente en el partido del expresidente Evo Morales, quien formuló un llamado desde Buenos Aires, Argentina, a que el resultado de las elecciones "sea respetado por todos".
Los bolivianos arribaron a los comicios en medio de un clima polarizado tras la anulación de las elecciones del año pasado por denuncias de fraude, situación que provocó un estallido social con 36 muertos y forzó la renuncia de Evo Morales tras 14 años en el poder.
Los comicios enfrentan al exministro de Economía Luis Arce, del Movimiento al Socialismo (MAS), el partido de Morales y favorito en las encuestas, y al expresidente Carlos Mesa, de la alianza centrista Comunidad Ciudadana (CC) y segundo en las preferencias. Hay otros tres candidatos a los que los sondeos daban menos opciones.
El empresario y exlíder cívico de derecha, Luis Fernando Camacho –de la organización CREEMOS y a quien los sondeos ubican tercero– podría resultar clave en una eventual disputa entre Arce y Mesa en el caso de que ninguno alcance los votos suficientes y que tengan que ir a una segunda vuelta, como pronostican las encuestas.
Para ganar en primera vuelta es necesario que el puntero obtenga el 50 por ciento más uno de los votos o un mínimo de 40 por ciento de los sufragios y al menos una diferencia de 10 puntos porcentuales sobre el segundo candidato más votado.
De ser necesario, la segunda vuelta se realizaría el 28 de noviembre. También se renovará la totalidad de la Asamblea Legislativa de 136 miembros para cinco años.
La misión de observadores de la Organización de los Estados Americanos (OEA) destacó que la jornada de votación presidencial en Bolivia se llevó a cabo de forma pacífica y llamó a los actores del proceso a aguardar con calma los resultados de los comicios generales. Agencias