MOSCÚ/GINEBRA.- Aviones rusos empezaron a abandonar Siria en el inicio del retiro de tropas dispuestas por Moscú para cumplir una misión de apoyo al presidente Bashar al-Assad, una señal que según un enviado de la ONU podría tener un impacto positivo en las negociaciones de paz en Ginebra.
En momentos en que la primera aeronave aterrizaba en Rusia, el enviado de la ONU Staffan de Mistura consideraba el repliegue anunciado por el presidente Vladimir Putin como "un suceso significativo" que podría propiciar avances hacia el logro de una solución y una transición política pacífica en Siria.
El anuncio sobre el retiro de la mayoría del contingente militar ruso en Siria ha llevado a los opositores de Assad a especular que Moscú podría intentar presionar al mandatario para alcanzar un acuerdo político, aunque Damasco ha descartado cualquier diferencia con su aliado y destacó que la decisión fue coordinada.
No está claro qué significa el retiro de tropas para el desenlace de la guerra o para el futuro de Assad.
Las conversaciones en Ginebra forman parte de un esfuerzo diplomático iniciado con el apoyo de Estados Unidos y Rusia para poner fin a una guerra de cinco años que ha dejado más de 250 mil muertos, además de generar una grave crisis de refugiados y permitir el avance del Estado Islámico.
La cooperación entre Estados Unidos y Rusia provocó un periodo de cierta calma en la guerra siria a través de un "acuerdo de cese a las hostilidades", que disminuyó fuertemente los enfrentamientos entre rebeldes y el gobierno en el oeste del país.
Pero el gobierno sirio, que había perdido territorio frente los rebeldes antes de la intervención rusa, indicó que no había ánimo de sellar un compromiso en la víspera de las conversaciones, descartando rotundamente una transferencia negociada de poder.
Algunos rebeldes han expresado un moderado optimismo frente al anuncio de Putin, mientras que otros dudan que Moscú esté cerca de abandonar al líder sirio.