OSLO.- El presidente Juan Manuel Santos y el líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño, "Timochenko", fueron señalados ayer como favoritos para adjudicarse el Premio Nobel de la Paz de este año, que se entregará la próxima semana, tras el acuerdo alcanzado entre ambos para poner fin a más de medio siglo de guerra civil, el cual será ratificado o rechazado por los colombianos en un plebiscito el domingo.
"El acuerdo es uno de los candidatos al premio de la paz más obvios que he visto", afirmó Asle Sveen, un historiador que sigue los premios, aunque dijo que podría depender de una votación por el "Sí" en el plebiscito del domingo, al que más de 34 millones de colombianos están convocados.
Sería el primer premio para América Latina después de que la activista por los derechos humanos guatemalteca, Rigoberta Menchú, lo ganara en 1992.
OTROS CANDIDATOS
Otros candidatos serían el estadounidense Edward Snowden por filtrar detalles de la vigilancia del gobierno norteamericano, la rusa Svetlana Gannushkina por su apoyo a los refugiados y los Cascos Blancos de Siria, por su apoyo a las víctimas de la guerra. También aspiran al galardón los negociadores de un acuerdo sobre el programa nuclear de Irán.
La firma del acuerdo, el lunes pasado, abrió el camino hacia el plebiscito del domingo 2 de octubre, una jornada en donde se decidirá si el país le apuesta a la paz y reconciliación o se inclina por mantener la guerra.
A cuatro días del plebiscito, que fue aprobado en la Constitución de 1991, la campaña entre los promotores del "Si" y el "No" están en la recta final en todos los medios de comunicación, redes sociales y en la plaza pública.
La campaña por el "Sí" la encabeza el presidente Santos, y el exmandatario y exsecretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, quienes han insistido en que si los colombianos rechazan el acuerdo de paz con las FARC, regresaría la guerra y se perdería la gran oportunidad de cerrar el capítulo de 52 años de violencia.
Los promotores del "No" están liderados por las dos figuras más representativas de la extrema derecha de Colombia, el expresidente Álvaro Uribe Vélez, y el exprocurador General, Alejandro Ordóñez.