Monterrey

Roberto Mercado: Y ahora… ¿qué hacemos?

Dos sucesos importantes en el sector eléctrico.

El inicio de este año ha sido la continuación del reto para el mundo por la situación provocada por el Covid-19. Enfocándonos solo en nuestro País, además de la pandemia, nos seguimos enfrentando a problemas que tienen años en México sin ser resueltos como: inseguridad, corrupción, educación, salud, pobreza y así podríamos seguir esta lista que parece interminable.

Pero este año, adicionalmente, se presentaron dos sucesos importantes en el sector eléctrico, de los cuales esperamos que las consecuencias del primero se presenten en poco tiempo y las del segundo tuvieron un gran impacto para la industria y población en general.

Estamos hablando de la iniciativa de reforma a la Ley de la Industria Eléctrica presentada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador que se publicó el 1 de febrero de este año, y la interrupción de energía eléctrica, en gran parte del territorio nacional, provocada por el desabasto de gas y por el frente frío número 35 a mitad del mismo mes.

Iniciaré hablando de la interrupción de suministro de electricidad. Durante la noche del 14 y madrugada del 15 de febrero se desconectaron diversas centrales de generación eléctrica en el norte y noreste del país, debido a la falta de suministro de gas natural y otras por fallas en la infraestructura provocadas por el clima.

Debido a las bajas temperaturas y alta demanda de consumo de gas natural y energía eléctrica en los Estados Unidos, el precio del gas natural se fue incrementando desde el viernes 12 de febrero, ese día tuvo un incremento del 200 por ciento. Al subir el precio de dicho combustible, CFE decidió parar su compra. El precio del gas natural se encontraba alrededor de los tres dólares por unidad (millón de BTU) y este llegó a subir hasta 200 dólares. Salieron de operación un total de 20 centrales de generación entre públicas y privadas, las cuales suman un total de 6 mil 591.5 MW de capacidad.

Este déficit de generación en el norte del país fue compensado con generación del sur, proveniente de centrales hidroeléctricas, de diésel y combustóleo principalmente.

También aportaron centrales del norte, de las cuales dos plantas renovables entraron con mil 500 MW. En total, se compensó 6 mil 441 MW de capacidad el 15 de febrero, sin embargo, se mantuvieron cortes rotativos de energía eléctrica en algunos estados para conservar el balance de carga-generación.

Debido a esta situación, gran parte de la industria se vio afectada por la falta de suministro de energía eléctrica y de gas natural, insumos vitales para la operación de las fábricas. El Centro Nacional de Control del Gas Natural (Cenagas) y proveedores notificaron restricciones de suministro de gas natural a los usuarios industriales, en algunos casos hasta del 99 por ciento. La mayor parte de la industria en el norte del país estuvo operando a baja carga durante varios días, lo que significó una gran pérdida económica para las empresas. Según datos de la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra), mantener detenida la operación de la Industria de manufactura de dicho estado, representa una pérdida de más de 7 mil 200 millones de pesos.

Respecto a la iniciativa de reforma a la LIE, realmente es un tema que ya se veía venir, sin embargo, no antes de los primeros tres años de mandato del Gobierno federal actual, como lo comentó en repetidas ocasiones el Presidente.

En julio del año pasado se filtró un memorándum del Mandatario dirigido a las autoridades competentes del sector eléctrico, en el que establece 17 puntos que deberán acatar para fortalecer a Pemex y CFE. En septiembre hubo una reunión entre el presidente y dichas autoridades, en la que acordaron que llevaran a cabo las acciones solicitadas en el memorándum.

En dicho documento también menciona que no descartan realizar una reforma a la LIE, con el fin de fortalecer a las Empresas Productivas del Estado. Con base en esto, la sorpresa más que la reforma a la LIE es el cuando y como se está realizando, es decir, antes de los 3 años de mandato y como iniciativa preferente. Sin duda alguna, esta iniciativa sumará a la desconfianza de inversionistas en México, veremos muchas empresas amparándose y luchando legalmente por defender lo que han venido haciendo legítimamente.

Ante el cambio en la LIE y las interrupciones de suministro de electricidad que se han venido dando, ¿qué hacemos? Para el caso de las interrupciones de suministro de electricidad, de la magnitud en la que se dio la más reciente, realmente se encuentra fuera del alcance de la industria manufacturera el poder prevenirlo. Habrá acciones preventivas que se pueden realizar para minimizar el impacto, pero por un corto periodo de tiempo. Caso contrario en el tema de la reforma a la LIE y cualquier otro cambio regulatorio, es decir, si está dentro de nuestras manos minimizar el impacto de cambios en la regulación en nuestros contratos de suministro de energía eléctrica.

Para esto es importante conocer y comprender tanto los cambios regulatorios como su contrato de suministro de energía eléctrica. La negociación de contratos de suministro se vuelve aún más relevante, por lo que recomendamos apoyarse en expertos en la negociación de contratos de compra de energía.

El autor es socio y director comercial de EPSCON, firma que brinda asesoría en compra de energía eléctrica para empresa.

Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.

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