Miguel Moreno Tripp: La recaudación

Cerró el 2019 y con ello es momento de hacer algunas cuentas. En particular veamos como estuvo la recaudación en ese año de crecimiento cero, -cosa que no sucedía antes- y como sí es necesario que la economía de un país crezca, para que, entre otras cosas, sus gobernantes puedan recaudar más impuestos e -idealmente- beneficiar a quienes más lo necesitan. Sí hace falta crecer. Contrastemos los dos últimos años.

De enero a diciembre de 2018, la recaudación fue de Ps$ 5,113 miles de millones (todos los montos en adelante están en miles de millones), monto que superó a lo programado de acuerdo a lo publicado en el DOF al 7 de diciembre de 2017, en Ps$ 334.8, es decir aproximadamente un siete por ciento más.

Los grandes contribuyentes, sin PEMEX, aportaron a la recaudación, Ps$ 1,134. Por tipo de actividad económica, destaca el sector terciario -los servicios- con Ps$ 811 y particularmente, el sector de servicios financieros y de seguros con Ps$ 204.4. Dentro del sector secundario -minería, electricidad, construcción e industrias manufactureras- destaca ésta ultima con Ps$ 233.9 millones. Estamos hablando del sector privado, reportado por el Servicio de Administración Tributaria, dependiente desde luego de la SHCP. Son sus números.

De nuevo, que se demuestre al sector privado, que se rige normalmente por la libre competencia y que le batalla para sobrevivir, es no tener idea de lo que se dice. O sí se tiene idea, pero saben que sus seguidores ni por casualidad se pondrían a analizar esta información.

¿Cómo estuvo el 2019? Todavía no se han publicado los datos a diciembre del 2019, pero sí a noviembre. Dos de los rubros más importantes, son el ISR e IVA. No sólo por su importancia relativa dentro de la recaudación total, sino porque además se pueden considerar como proxy, es decir como dato indicativo, de la actividad económica.

Se tenía programado recaudar, por concepto del ISR, Ps$ 1,589 y se recaudaron Ps$ 1,533, monto menor en Ps$ -56 8 miles de millones, equivalente a un -1.6 por ciento menos que el mismo período del 2018 o bien, un 3.5 por ciento menos que lo programado.

Respecto del IVA, se recaudaron 855.1 pesos, un monto menor en Ps$ -57 mil millones equivalente a un -3.7 por ciento con respecto al año anterior y un ¡6.25 por ciento menor a lo programado para el 2019!

No solo del IVA vive el hombre, (ni los hombres ni las mujeres del SAT) pero si consideramos que debiera ser un impuesto general que no se aplicara solo por excepción, es decir, habrá conceptos exentos o con tasa cero, pero serían la excepción. La regla es que toda actividad económica que genere valor agregado debería pagar su respectiva tasa.

El IVA se compensa entre los participantes de la cadena productiva, hasta llegar al último consumidor que, pues eso, consume los bienes y servicios finales. Analizando los componentes del PIB, en muchos países es "regla" que el consumo sea de unas dos terceras partes de dicho indicador.

Es sin duda una alerta roja porque la baja del IVA refleja un menor consumo, confirmando el nulo crecimiento de la economía y por el otro lado lo ya mencionado: bajan los ingresos recaudatorios del gobierno. Menos dinero disponible para atender las necesidades de la población. Hay que dar un golpe de timón.

Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.