Monterrey

Metamarketing, el Nuevo Paradigma

Los cimientos de muchas empresas se están tambaleando y las reglas están cambiando, especialmente las de la mercadotecnia.

Te voy a hacer una pregunta: ¿Cuál crees que es el concierto que ha tenido mayor número de asistentes en la historia? Puedes pensar que es alguno de The Beatles, Michael Jackson o Madonna, pero no, no fue ninguno de ellos. La respuesta es Marshmello, un DJ con una máscara extraña parecida a un bombón mezclado con un Lego. Quien tenía el record era Rod Stewart, con 3 millones 500 mil asistentes en Rio de Janeiro; Marshmello reunió a 10 millones de personas… en Fortnite, el videojuego de tiempo real más popular en el planeta.

Esto es un ejemplo del cambio drástico que estamos viviendo. ¿Quién hubiera pensado que a las bandas musicales les interesaría más aparecer en un videojuego que en el canal de MTV? Pero no sólo la industria musical está cambiando, la era digital ha impactado a todo tipo de negocios, como los de hospitalidad, de "retail" o de transporte. Los cimientos de muchas empresas se están tambaleando y las reglas están cambiando, especialmente las de la mercadotecnia.

Por mucho tiempo la mercadotecnia vivió una era romántica plagada de artistas que con sus ideas creativas hacían anuncios emotivos que podían durar años al aire. Los creadores que lograban recibir un premio en Cannes, dejaban su nombre cimentado en el "pináculo" de la publicidad.

Esos días se acabaron. Los mensajes hoy en día, a lo mucho, tienen dos semanas de relevancia para después quedar en el olvido. Antes era imposible medir el impacto de un anuncio en los medios, pero las empresas ya cuentan con herramientas para identificar si sus anuncios venden en las distintas plataformas digitales, lo que pone a los mercadólogos en una posición de entrega de resultados a la que no estaban acostumbrados. Además, existen aplicaciones como Canva, Splice o LumaFusion que permiten a una sola persona lograr lo que antes hacía toda una agencia de publicidad.

La era del romanticismo publicitario está por terminar. Estamos atravesando una nueva etapa al que llamo el "metamarketing" (el prefijo "meta" significa ir más adelante), una disciplina dinámica orientada a generar resultados concretos de venta a través de la comunicación constante de contenido digital y la generación de experiencias.

Algo muy alentador de este cambio es que se ha generado una democracia donde no necesariamente las empresas que tienen el mayor presupuesto son las que dominan. Empresas jóvenes, aquí en Monterrey, como la cafetería "La Postrería" y el restaurante "Muncher House" han logrado obtener miles de seguidores a base de difusión en Instagram y Facebook. También está el caso de la banda regiomontana "Desierto Drive", que ha generado un modelo de venta directa de su música y "merchandise" creando su propia tienda online y promocionando en medios digitales. Así brincan a todo tipo de intermediarios para llegar directamente con sus fans.

Para estar vigentes, se debe cambiar el paradigma de cómo se trabaja hoy la mercadotecnia. Hay que captar la atención de la gente de manera permanente y crear comunidades, soportando el bombardeo de mensajes que se reciben diariamente en la arena digital. También se deben crear experiencias únicas, tanto "offline" como "online" para diferenciar los productos y servicios de la competencia tratando de sobresalir hasta donde sea posible, así sea repartiendo muestras gratis en el próximo concierto de Marshmello en Fortnite.

El autor es Director General de "Signal Retail and Entertainment"; especializado en temas de mercadotecnia y experiencia del consumidor.

Opine usted: luistrech@gmail.com

Instagram: @luis_trech

Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.

También lee: