Lissely Ancira: Volveremos a la normalidad cambiada

Nuestros hábitos han cambiado, ahora el cubre bocas se convierte una prenda esencial cada que salimos de casa, debemos cargar con gel anti-bacterial y limpiar todos los objetos que nos rodean para prevenir el contagio. Se siente en las noticias y redes la presión del cambio de rutina que es positivo ya que nos hace una comunidad más salubre pero con frustración ya que no tenemos la libertad de ir a los lugares que más nos gustan pues están cerrados. La economía no está parada, está de bajada. Todos se preguntan si este virus nos cambiará definitivamente la forma en la que vivimos, viajamos, convivimos. Se podría ver que la salubridad será en el corto plazo un elemento importante en cualquier negocio que tenga contacto con personas como por ejemplo:

1. Restaurantes: Se podría considerar que los restaurantes tendrán que ser con espacios más abiertos para siempre respetar la sana distancia; además los drive thru o servicios para llevar van tener una tendencia a la alza durante y después del virus. Las capacidades de ocupación en los restaurantes estimamos llegarían a ser del 25 por ciento para que se vayan adaptando a las nuevas medidas de salubridad.

2. Cines: Se nota un panorama muy complicado para los espacios comerciales de cine. Su limpieza tendría que ser parte de su procedimiento antes y después de cada película. Se estima la tendencia a la alza de nuevas plataformas para ver películas en línea y pedir comida de cine para entrega en casa.

3. Aeropuertos: Nuevas tecnologías se verán en los aeropuertos. Los tiempos de espera para tomar un avión se alargarán más ya que habrá puntos de chequeo de temperatura en las personas y restricciones de viaje con procedimientos más estrictos.

4. Escuelas: Este año el ciclo escolar fue radicalmente afectado. Las escuelas también requerirán medidas de salubridad muy estrictas para mantener sus instalaciones con protección para sus alumnos. El sistema de educación se ha visto forzado a ejecutarse en plataformas en línea por lo que muchos podrían mantenerse así después del virus.

5. Hoteles y Airbnb: Nuevas tecnologías de limpieza se requerirán en las instalaciones de los hoteles; como por ejemplo sistemas de aires acondicionados que cuenten con filtros especiales y emisión de sanitización en las habitaciones.

Una de las claves para prevenir el virus en cualquier lugar sería contar con pruebas que se le efectúan a las personas y con ello ir descartando futuros contagios. No se trata solamente de la vacuna o de acciones de salubridad, se trata de saber quién está contagiado. Una vez que logramos controlar los contagios, volveremos a la normalidad cambiada de nuestras vidas en los establecimientos comerciales post-covid.

Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.