Monterrey

Jorge O. Moreno: #Quédateencasa, la responsabilidad económica de uno sobre todos

El problema fundamental es que, a pesar de los controles y la previsión de muchos ciudadanos, habrá un grupo de personas cuyo comportamiento irresponsable termine por afectar a otros de forma indirecta.

En las pasadas dos semanas, desde la última entrega de la presente columna, la cantidad de noticias económicas y financieras por analizar ha sido abrumadora y el espacio que comparto con usted mi lector es insuficiente para proporcionar una reflexión clara y unificada al respecto, pues cada una requiere de extensos párrafos para siquiera describir su contexto ya no digamos sus consecuencias; prácticamente no hubo día en donde una nueva contingencia, cual efecto dominó, tuviera efecto sobre otra variable económica o financiera, y así sucesivamente, reforzando otros efectos arrastrados de meses anteriores, todo lo anterior mientras el número de casos y decesos confirmados por Covid-19 se incrementaban a nivel internacional, nacional y local.

Hoy quisiera usar este espacio para dejar una breve memoria para nuestra historia económica nacional con un pequeño resumen de todas aquellas noticias financieras que ocurrieron, pero de manera más importante, contribuir con un mensaje que desde ésta mi trinchera contribuya genuinamente a su verdadero bienestar y el de sus seres amados: #Quédateencasa, por favor y si es posible, por su bien y el de todos.

Entre muchas otras noticias, dominaron los encabezados de las secciones financieras la caída drástica en los precios del petróleo y sus derivados financieros hasta alcanzar niveles negativos en el mercado de futuros (hecho histórico para nuestro país), la ausencia de una estrategia convincente por parte del gobierno federal quien (intransigentemente) sigue priorizando los proyectos insignia ya conocidos por todos y anunciando una inyección mayor de recursos a Pemex, y en días pasados, la reducción en la tasa de interés de referencia de la política monetaria por decisión unánime de su Junta de Gobierno para ubicarla en seis por ciento de la mano de un paquete de 10 medidas implementadas por Banco de México a manera de una política monetaria más cercana a la flexibilización cuantitativa (quantitative easing) empleada por otras autoridades internacionales. En este caso, debe destacarse como Banxico, desde su autonomía y dado su mandato constitucional en sus funciones en el sistema económico, hayan asumido un papel responsable y de liderazgo en política económica y financiera necesario en el país, garantizando una inyección de liquidez al sistema con recursos superiores al tres por ciento del PIB en 2019.

Ahora, como muchos especialistas anticipaban y en particular las autoridades estatales advirtieron, en México estamos comenzando la etapa más complicada en la evolución de la pandemia de Covid-19. A pesar de todas las precauciones que desde etapas tempranas fueron adoptadas en el estado de Nuevo León, el día de ayer en su informe diario, el gobernador Jaime Rodríguez y el secretario de salud Manuel de la O, mostraron el incremento diario en 165 nuevos casos de Covid-19, valor alarmante comparado con los 30 casos incrementales en el día anterior. No obstante el acceso a información, el cierre de actividades no esenciales, y las medidas que se han adoptado, éstas han sido insuficientes para contener el contagio del virus, y si bien su mortalidad sigue concentrada en adultos mayores con otras enfermedades mórbidas, las autoridades enérgicamente destacaron el grado de contagio mayor en el grupo de edad entre 25 y 44 años, quienes son los pacientes que están mayoritariamente en calle, y que son foco de contagio a otros grupos más vulnerables. La situación del estado, a pesar de su relativamente fuerte sistema de salud, en palabras del secretario Manuel de la O es textualmente "muy muy grave" (aproximadamente al minuto 56 del mensaje del día de ayer 23 de abril).

El concepto económico clave para entender la razón de quedarse en casa es la existencia de una externalidad económica que el comportamiento individual genera en la sociedad. Si usted, decide tomarse un refresco o comer su postre favorito, el costo y beneficio de tal hecho es asumido por usted, y esto en principio, no genera un efecto indirecto en la sociedad más allá de lo que el precio y costo que pagó por su producto haya integrado. Esto no es el caso cuando su decisión, por ejemplo, de salir, ocurre en una pandemia como la actual en donde el comportamiento de uno tiene efectos indirectos que repercuten en muchos otros, de manera indirecta, generando costos sociales mucho muy altos que no son directamente integrados en los costos y beneficios de la persona que potencialmente se vuelve foco de contagio de todas las personas que tengan contacto indirecto con él o ella.

El problema fundamental es que, a pesar de los controles y la previsión de muchos ciudadanos, habrá un grupo de personas cuyo comportamiento irresponsable termine por afectar a otros de forma indirecta, y la gravedad del asunto radica en que la morbilidad y la alta tasa de contagio del Covid-19. Por favor, #Quédateencasa, sea responsable, y si por alguna razón debe salir de su hogar, hágalo tomando todas las precauciones posibles.

En este momento que nuestra sociedad requiere certeza de un mejor futuro, seamos el cambio que nuestro país necesita, un cubrebocas y un ciudadano responsable a la vez.

Notas al pie:

1. Mientras terminaba de escribir estas líneas (jueves, 5 de la tarde) leo que la Secretaria de Energía, Rocío Nahle, declara que la refinería en Dos Bocas sigue, y que no conoce recomendaciones de ningún "especialista en refinerías" (sic) nacional o extranjero que sugiera frenar su construcción. Una declaración desalentadora, insensible, y decepcionante viniendo de un funcionario de su nivel.

2. La nueva deuda contratada en bonos por parte del gobierno federal mexicano a través de la SHCP en días reciente se emitió a un costo financiero (tasa de interés) superior hasta en cinco puntos base comparado con una emisión reciente del gobierno de Paraguay, no obstante, este país tiene una calificación de riesgo inferior a México (BB vs. BBB, respectivamente). Más deuda, a un mayor costo, y focalizada desde el proyecto ejecutivo en proyectos no prioritarios. Todo mal.

3. ¡Gracias personal médico! Son motivo de orgullo nacional.

Doctor en Economía por la Universidad de Chicago. Es Profesor-Investigador de la Facultad de Economía de la UANL.

Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.

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