Pablo de la Peña: Calidad y confianza en nuestro gobierno

El pasado 31 de marzo arrancaron las campañas locales para elegir a más de 19,700 servidores públicos, de los cuales se elegirán 9 gubernaturas, 1,803 presidencias municipales, 1,098 miembros de congresos locales, entre otros cargos. Con las campañas también iniciará la competencia por las propuestas políticas para ganar votos.

A nivel municipal las propuestas fluctúan en un amplio rango de ideas, desde temas muy específicos y particulares como el alumbrado público, pavimentación y en general sobre los servicios básicos que un ayuntamiento debe ofrecer, hasta temas más complejos y “elevados” como innovación tecnológica, bienestar social y calidad ambiental, por mencionar algunos. Si las y los candidatas(os) a las presidencias municipales en el país se limitaran a hacer campaña prometiendo la eficiencia y eficacia de los servicios básicos municipales, nadie las elegiría.

Sin embargo, creo que en realidad es difícil de que nos acordemos de todas las promesas que las y los candidatas(os) nos hicieron en campaña, y terminamos evaluando la calidad de su gestión a través de la calidad de los servicios básicos en nuestras ciudades.

Hace unas semanas, el INEGI publicó la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) para el 2023, y les recomiendo que visiten la página del INEGI porque para quienes nos interesa este tema de la gestión pública municipal trae información interesante.

Esta encuesta no solo mide la percepción de la ciudadanía sobre la calidad de los servicios públicos, sino también tiene una medición sobre la corrupción y sobre la confianza en las instituciones.

Esta encuesta se realiza cada dos años y se tiene datos desde el 2015, por lo que en las últimas tres mediciones podríamos decir que en muchos casos hay administraciones de ayuntamientos que probablemente fueron reelectas en el 2019, en el 2021, o en el 2023, y muchas también serán administraciones municipales por primera vez.

Dentro de los servicios públicos incluidos en esta encuesta y que tradicionalmente son responsabilidad del municipio se encuentran el servicio de agua potable, drenaje y alcantarillado (aunque en algunos casos es responsabilidad del estado), el mantenimiento de las calles y avenidas, el alumbrado público, parques y jardines, servicios de policía y recolección de basura.

Es interesante que el servicio que tradicionalmente obtiene mejor calificación a nivel nacional es la recolección de basura, con un 73 por ciento de la población mayor a 18 años que dice estar satisfecho con dicho servicio en su comunidad.

Por el contrario, el servicio que tradicionalmente tiene el menor porcentaje de la población satisfecha es el mantenimiento de calles y avenidas con un 27 por ciento, seguido de los servicios de policía con un 30 por ciento.

Para el caso del mantenimiento de calles y avenidas el estado de Baja California obtuvo el menor porcentaje con el 17 por ciento, y en el otro extremo está el estado de Guanajuato en donde el 47 por ciento de su población mayor a 18 años dice sentirse satisfecha con sus calles y avenidas.

En cuanto a la calidad de los servicios de la policía, el promedio nacional es muy bajo, pues solo el 30 por ciento de la población dice estar satisfecha con los servicios de la policía, pero adicionalmente, tenemos tres estados en donde menos del 20 por ciento de su población dice estar satisfecha. Primero tenemos al estado de Guerrero en donde solo el 17.5 por ciento de su población dice sentirse satisfecha, seguido de Chiapas con el 17.8 por ciento, y Michoacán con el 18 por ciento.

En el otro extremo tenemos que el 55 por ciento de la población de Yucatán dice estar satisfecha con los servicios de su policía, y recordemos que es el estado con la menor tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes en el país, menos de 10. Le sigue el estado de Baja California Sur con el 47 por ciento, y el estado de Aguascalientes con el 41 por ciento de su población que dice estar satisfecha con su policía.

Como podemos ver, el porcentaje de la población en nuestro país que dice sentirse satisfecha con los servicios básicos de las administraciones locales es relativamente bajo, por no decir muy bajo. Solo el servicio de agua potable alcanza un 70 por ciento de satisfacción, pero los servicios fundamentalmente básicos de una administración municipal como el servicio del agua, el mantenimiento de las calles y la seguridad requieren de grandes mejoras sustanciales y a pesar de que quizá haya habido cambios en las administraciones de los ayuntamientos en esos estados, no hay ninguna mejora sustancial entre el 2019, el 2021 y el 2023. Entonces ¿qué nuevo nos prometerán las y los candidatos actuales para las ciudades en nuestro país?

Con respecto al tema de la corrupción, adicionalmente a que en este 2023 el 83 por ciento de la población de 18 años y más, considera que los actos de corrupción son frecuentes en nuestro país, la encuesta también mide la tasa de prevalencia de actos de corrupción por cada 100 mil habitantes, esta tasa el INEGI la mide tomando la información de las personas mayores de 18 años de edad, que realizaron algún trámite o tuvieron algún contacto con algún servidor(a) público(a) y fueron víctimas de un acto de corrupción.

En el 2023 la tasa de prevalencia de corrupción fue de 13,966 comparada con 14,701 por cada 100 mil personas en el 2021; y si bien podríamos decir que la tasa de prevalencia de corrupción bajó un 5 por ciento del 2021 al 2023, tenemos estados que esta misma tasa se disparó de manera extraordinaria. De manera sorprendente los estados de Chihuahua y Baja California Sur tuvieron incrementos del 110 y del 101 por ciento respectivamente, respecto al 2021.

Por otro lado, tenemos que los estados de Puebla, México y Guanajuato tuvieron reducciones del 39, 32 y 31 por ciento respectivamente en sus tasas de prevalencia de corrupción.

Finalmente, esta encuesta también mide el grado de confianza en las instituciones en nuestro país. Aunque no es de extrañarnos, pero sí de preocuparnos, es que los partidos políticos obtienen de manera recurrente el porcentaje más bajo de personas que dice tener confianza en ellos, con el 29 por ciento.

Solo el 35 por ciento de la población mayor a 18 años dice tener confianza en las cámaras de diputados y senadores, en los policías solo el 37 por ciento de la población tiene confianza. Solo el 48 por ciento de la población dice tener confianza en sus gobernadores(as) y solo el 50 por ciento dice tener confianza en sus presidencias municipales.

En resumen, en general no estamos satisfechos con los servicios básicos que recibimos en nuestras ciudades, más del 80 por ciento de la población considera que son recurrentes los actos de corrupción, y en las instituciones en las que menos confianza tenemos son en los partidos políticos, en nuestros representantes políticos y en nuestros gobernantes.

Ahora si ¿qué es lo que las y los candidatas nos van a prometer para que votemos por ellos? ¿lo que nos prometan realmente hará un cambio sustancial en la calidad de los servicios públicos y en la confianza que podamos tener de ellos en los próximos años? No quiero ser cínico, pero si realista y motivarnos a buscar mejores candidatas y mejores candidatos para estas próximas elecciones. Es cierto que, las candidatas y los candidatos ya están definidos, ahora falta que nosotros hagamos la tarea de analizar y evaluar para seleccionar la mejor opción y no la menos peor.