Una plancha gasta más electricidad que un refrigerador, incluso tu licuadora gasta más energía que una pantalla de 32 pulgadas. Si no lo sabías es probable que tu recibo eléctrico también esté elevándose sin razón, por lo que aquí te damos una lista de cuánto gastan los principales electrodomésticos en casa para que puedas reducir ese recibo que llega cada dos meses con las siglas CFE.
Lo primero que debes saber es que los aparatos que convierten la electricidad en calor necesitan una potencia eléctrica mayor que los que tienen otras funciones.
De acuerdo con un estudio de consumo reciente, realizado por la Profeco con apoyo de la Secretaría de Energía, el electrodoméstico que más cantidad de potencia consume es la aspiradora con mil 400 watts, ¿te sorprende?
El horno de microondas y la plancha con consumos de mil 300 y mil 150 watts están en segundo y tercer lugar, por arriba del consumo del aire acondicionado que consume mil watts en el caso de uno minisplit de una tonelada de refrigeración.
Ahora, cuando se adquiere uno de esos artículos, es importante tener en cuenta la cantidad que consumen de energía.
Se debe prestar especial atención a la etiqueta energética que se incluye en algunos electrodomésticos de gran uso en el hogar como el refrigerador y lavadora principalmente, pregunta a tu asesor de venta sobre el uso de energía de cada aparato.
Es muy posible que un electrodoméstico que gaste menos electricidad te salga más caro, pero a la larga valdrá la pena.
Un tip más es, que incluso los aparatos electrodomésticos que gastan menos energía, te los puede financiar el gobierno, en el caso de tu micro, pequeña o media empresa.
Esto porque el Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE) cuenta con el programa eficiencia energética el cual financia desde lamparas hasta bombas de aguas, pasando por aires acondicionados y refrigeradores.
Los beneficios para los usuarios de este programa gubernamental incluyen convertirse en una empresa comprometida con la protección del medio ambiente, contar con tecnología de punta en el consumo de energía eléctrica, reducción de los costos de facturación eléctrica, incremento de la competitividad y productividad, disminución de costos de mantenimiento y que los costo de los equipos son deducibles de impuestos.