Los mercados del petróleo cerraron la jornada con pérdidas, aunque lograron una ganancia de hasta el 2 por ciento en la semana comprendida del 6 al 10 de noviembre.
Los contratos tuvieron una jornada de altibajos ante los continuos recortes de suministro y las expectativas de que el acuerdo para reducir la producción sea extendido durante una reunión a fin de mes.
El contrato del crudo Brent marcó una marginal caída de 0.06 por ciento, para cerrar en 63.52 dólares. Sin embargo, en el balance semanal tuvo una ganancia de 2.33 por ciento en el Intercontinental Petroleum Exchange (ICE).
En la Bolsa Mercantil de Nueva York, el barril del crudo WTI de referencia en Estados Unidos cayó 0.75 por ciento, para terminar en 56.74 dólares por barril, levemente por debajo del máximo de esta semana de 57.92 dólares por barril, su nivel más alto en más de dos años.
El contrato limitó el avance semanal al 2 por ciento, sumando así su racha más larga de ganancias semanales desde octubre de 2016.
Los futuros subieron a medida que se endurecen los suministros mundiales y con señales de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ampliará los recortes de producción más allá de fines de marzo.
Asimismo, las detenciones de la realeza e inversores de Arabia Saudita ante una redada anticorrupción, aumentó las tensiones entre Arabia Saudita (el mayor exportador de petróleo del mundo) e Irán, un país conocido durante mucho tiempo por ser un campo de batalla para las guerras de poder en el Medio Oriente.
La disputa entre ambos países elevó las preocupaciones sobre posibles interrupciones en el suministro y enviando los precios a su nivel más alto en más de dos años. Pero algunas de esas ganancias desaparecieron el viernes, y los futuros cayeron hasta un 1,1 por ciento en Nueva York frente a una ola global de acciones y bonos.
También hay expectativas en el mercado de que en la próxima reunión de la OPEP, el 30 de noviembre, el grupo acuerde extender los recortes más allá de la actual fecha de expiración de marzo de 2018.
Este viernes, el diario saudí Al Hayat citó al ministro de Energía de Emiratos Árabes Unidos, Suhail bin Mohammed al-Mazroui, aseguró que los productores de petróleo no tendrán mayores dificultades a la hora de tomar la decisión de extender el pacto.
Otro factor que respaldaba los precios era la fuerte demanda desde el sudeste asiático. Sin embargo, algunos analistas sostienen que señales técnicas indican que el avance en los precios del crudo podría no durar mucho.
El banco estadounidense Goldman Sachs advirtió de más volatilidad de precios en el futuro, citando el aumento de las tensiones en Oriente Medio, especialmente entre los miembros de la OPEP Arabia Saudita e Irán, junto al incremento de la producción de crudo en Estados Unidos.